Tamara Falcó e Íñigo Onieva celebran su segundo aniversario de boda con una escapada de ensueño a la Provenza francesa. La marquesa de Griñón compartió con sus fans algunas de las primeras fotos de su álbum: “Día 1 – Llegada a la Provenza, simplemente lo que necesitábamos. Tal cual lo que hacía falta (Anniversary mode on)”, dice mientras acompaña sus palabras con algunas de las imágenes más románticas y bucólicas de la región, en plena floración de los campos de lavanda.
Sus fotografías reflejan a la perfección la esencia romántica, serena y elegante de la campiña francesa, mientras que Íñigo Onieva aporta un enfoque más aventurero y nostálgico a este maravilloso paisaje provenzal con la imagen de un coche clásico francés, un Citroën 2CV descapotable, mientras disfrutan de un recorrido inolvidable por la región.
Para su primer día de escapada, Tamara Falcó eligió un vestido camisero con lazada a la cintura de su colección TFP by Tamara Falcó para Pedro del Hierro en color morado, muy acorde con su visita a la campiña francesa con sus campos de lavanda en flor, y se dejó envolver por la esencia bucólica de la campiña, disfrutando de un entorno incomparable junto a Íñigo Onieva. La pareja descubre algunos encantos de esta región del sur de Francia entre pueblos románicos, paisajes idílicos al atardecer y hoteles de lujo como el Airelles en Gordes. Un enclave perfecto para escapar de la rutina y disfrutar de la naturaleza, la desconexión y cómo no, de los sabores exquisitos de la gastronomía provenzal, así como del arte contemporáneo en la Fundación Vasarely en Aix en Provence.
El 8 de julio se cumplieron dos años desde que se dieron el 'sí quiero' en una boda de ensueño en el Palacio El Rincón. "Hoy cumplimos dos años desde que el Señor bendijo nuestra relación con el sacramento del matrimonio", señalaba la marquesa de Griñón junto a una emotiva imagen en blanco y negro del día de su boda. "Dos años de camino juntos, con sus luces y sus sombras, con momentos de alegría y también de lucha, pero siempre buscando crecer, aprender y amar mejor. Gracias, mi amor. Te quiero muchísimo y ojalá lleguemos al cielo de la mano juntitos", añadía la hija de Isabel Preysler, demostrando que su matrimonio con el empresario madrileño es cada día más sólido.
La relación entre Tamara Falcó e Íñigo Onieva es un claro ejemplo de que, cuando el amor es verdadero, todo es posible. A pesar de los altibajos que vivieron durante su noviazgo, su historia de amor avanza con más fuerza que nunca, demostrando que, aunque existen piedras en el camino, juntos son capaces de superar cualquier obstáculo. La pareja atraviesa una etapa especialmente feliz y estable en su relación. Ambos han sabido compaginar sus agendas profesionales con momentos románticos, fiestas con amigos y celebraciones en familia, así como también grandes escapadas juntos, como esta última por su aniversario. El matrimonio ha manifestado en varias ocasiones su ilusión por ser padres, un deseo que, aunque aún no ha podido cumplirse, sigue presente en sus planes de futuro. El empresario, que ha encontrado en el mundo de la restauración su gran vocación, vive un momento de plenitud junto a Tamara, que compagina su faceta como diseñadora con sus colaboraciones de éxito en televisión.