Georgina Rodríguez ha dejado claro en más de una ocasión que la fe es algo muy importante para ella. Y ha vuelto a hacerlo. Tras sus vacaciones de ensueño en Mallorca con su pareja, Cristiano Ronaldo, la modelo ha hecho una parada en Portugal, donde ha visitado uno de los lugares en los que encuentra esa paz y espiritualidad: el santuario de la Virgen de Fátima, situado en Ourém.
La propia Georgina ha compartido las imágenes de su peregrinación. En ellas, podemos verla por la explanada principal, vacía en ese momento, con un gran ramo de rosas blancas para depositarlas en el altar. La modelo ha lucido un vestido largo hasta los pies, blanco con flores caladas, a juego con su ramo. Ha complementado su estilismo con unas sandalias con plataforma de esparto, un bolso Birkin color café y, lo más llamativo, una gorra deportiva. Un look que no ha pasado desapercibido.
Ya en el interior del santuario, Georgina ha estado observando con devoción la imagen del altar mayor. También estuvo escuchando la misa, tal y como compartió con sus seguidores. Se trata de un lugar muy importante para ella, en el que conecta no solo con su fe, sino también con el país que vio nacer a su pareja: Portugal.
No es la primera vez que visita el santuario de la Virgen de Fátima. El año pasado, también en julio, estuvo allí acompañada por cuatro de sus niños: Eva, Mateo, Alana Martina y Bella descubrieron este lugar y colocaron algunas velas. En aquella ocasión, los grandes ausentes fueron Cristiano Jr. y Cristiano Ronaldo, quien se encontraba en plena concentración para la Eurocopa 2024. Esta vez, sin embargo, parece que ha estado sola.
La peregrinación al santuario llega después de disfrutar de unas vacaciones a todo lujo en Mallorca con el futbolista. Pasaron algunos días en aguas de Illetes y en el puerto de Andratx. A bordo de su espectacular Azimut Grande 27 Metri, se relajaron y disfrutaron de momentos románticos como el que compartió la propia Georgina en un jacuzzi. Ahora, la modelo ha querido vivir una escapada más espiritual.