Sergio Peris-Mencheta, conocido por el gran público desde sus inicios en la mítica serie Al salir de clase, ha protagonizado uno de los testimonios más sobrecogedores y esperanzadores del panorama artístico español. Tras dos años de tratándose una leucemia que casi le arrebata la vida, el actor ha compartido con sus seguidores un momento profundamente simbólico: su regreso al mar.
Un sueño cumplido
El intérprete ha publicado en sus redes sociales un vídeo en el que se le ve acercándose a la orilla, con paso firme y visiblemente emocionado. Un gesto que, aunque sencillo en apariencia, encierra un significado monumental para alguien que ha atravesado meses de hospitalización, tratamientos agresivos y finalmente un trasplante de médula ósea en Estados Unidos.
"Han pasado dos años, que parecen tres", dice Sergio con una sonrisa plena, justo antes de mojarse los pies en el agua. El vídeo, grabado por su mujer, la también actriz Marta Solaz, es un testimonio de la resistencia, la ternura y el profundo agradecimiento del intérprete hacia la vida y hacia quienes le han acompañado en este durísimo proceso. Aunque no aparece en cámara, se escucha a su pareja emocionada, pidiéndole que se gire para poder verle el rostro.
Las reacciones no se han hecho esperar. Figuras del cine, la televisión y el deporte han querido mostrar su cariño y admiración. Maribel Verdú y Loles León, entre otros, han dejado mensajes llenos de amor y fuerza.
Unos años duros
Durante todo este tiempo, Peris-Mencheta no ha ocultado los aspectos más crudos de su enfermedad. Desde los primeros síntomas hasta los efectos secundarios del tratamiento, ha compartido su camino con una honestidad que le ha valido aún más el cariño del público. "Las articulaciones dan guerra, tengo las manos y los pies hinchados, náuseas... Pero la cabeza más o menos va funcionando", declaró recientemente en una entrevista en Telecinco, donde presentó su libro 730 días, una crónica íntima de su duro proceso contra la leucemia.
En esa misma conversación, reveló que ha tenido vacíos de memoria, episodios que sólo ha podido recuperar gracias al documental que él y Marta grabaron durante todo el proceso. "He visto imágenes que no recordaba. Menos mal que se grabaron, porque no tengo conciencia de haberlas vivido", confesó.
Su estancia en Estados Unidos
El también director de teatro, de 50 años, afrontó el tratamiento en Estados unidos, así como el posterior trasplante de médula. Allí permaneció hospitalizado varios meses, alejado de los focos, centrado únicamente en sobrevivir. Hoy, su regreso a la playa marca algo más que un simple paseo por la arena: es una declaración de victoria, un acto de vida.
La publicación de Sergio ha acumulado miles de comentarios y likes en cuestión de horas, y ha convertido al actor en símbolo de lucha, resiliencia y humanidad. El actor sigue en proceso de recuperación, pero su regreso al mar deja claro que cada paso cuenta, y que incluso los gestos más cotidianos pueden convertirse en actos heroicos.