Durante el partido disputado en el torneo de Wimbledon entre Novak Djokovic y Flavio Cobolli, que concluyó con la victoria del tenista serbio por 6-7, 6-2, 7-5 y 6-4, los jugadores no fueron los únicos protagonistas de la jornada. Entre los ilustres asistentes destacó la presencia de la reina Camilla, quien ocupó su lugar en el palco real —conocido como el Royal Box— para presenciar un encuentro de alta tensión. Sin embargo, no fue la única figura reconocida en las gradas: justo detrás de la esposa del rey Carlos III se encontraba el actor Hugh Grant, quien se volvió viral en redes sociales tras ser captado aparentemente dormido durante los cuartos de final del torneo.
Pocos minutos antes del inicio del partido, el reconocido actor británico Hugh Grant, célebre por su participación en exitosas películas como Heretic, El diario de Bridget Jones y Florence Foster Jenkins, hizo su aparición en las gradas del All England Lawn Tennis and Croquet Club, en Wimbledon, Londres. Lo hizo acompañado de su esposa, la productora sueca Anna Elisabet Eberstein. El protagonista de comedias románticas y dramas aclamados ocupó uno de los asientos más privilegiados del recinto: justo detrás del palco real, donde se encontraban la reina Camilla y el ex primer ministro John Major. Antes de tomar asiento, el matrimonio saludó cordialmente a la monarca y a los distinguidos invitados que la acompañaban, en un gesto de respeto y elegancia acorde al entorno. Poco después, comenzó el esperado encuentro tenístico, en un ambiente cargado de tradición y exclusividad.
El momento más viral de la jornada llegó durante el tie break del primer set. Justo en ese instante, las cámaras de televisión que retransmitían el partido en directo enfocaron, de forma fortuita, la zona donde se encontraba el actor. Para sorpresa de todos, Hugh Grant aparecía visiblemente dormido, con los ojos cerrados y la cabeza ligeramente inclinada, ajeno a la tensión del juego. La imagen no tardó en recorrer las redes sociales, convirtiéndose en uno de los temas más comentados del día. Aunque el actor no permaneció dormido durante todo el encuentro, ese breve pero revelador instante captado por la transmisión llamó poderosamente la atención, no solo por su inesperado carácter, sino también porque Grant estaba sentado justo detrás de la reina Camilla, lo que acentuó aún más la repercusión del momento.
Tal como se aprecia en las imágenes que acompañan estas líneas, la estrella del cine internacional aparece visiblemente recostada en su asiento, con el mentón ligeramente inclinado hacia el pecho y las gafas de sol cubriendo sus ojos, lo que dificultaba saber si estaba atento al partido… o sumido en un profundo sueño. Sin embargo, el detalle que terminó de confirmar su aparente desconexión fue que, en ese preciso instante, no sostenía su teléfono móvil —algo bastante inusual en un evento de este tipo—, lo que reforzó la teoría de que realmente se había quedado dormido. La situación provocó reacciones inmediatas tanto en redes sociales como en la propia retransmisión televisiva. El presentador Chris Fowler no dudó en comentar el momento con un toque de humor, preguntándole en directo al extenista John McEnroe: "¿Está con nosotros?" A lo que la leyenda del tenis respondió entre risas: "Parece que le vendría bien un pequeño toque de atención. Es un desempate, díselo. ¡Queda mucho por hacer!". El intercambio no hizo más que añadir un toque cómico a una escena que ya había comenzado a viralizarse por sí sola.
Como era de esperar —y más aún en la era digital en la que vivimos— las redes sociales no tardaron en hacerse eco del insólito momento. La imagen de Hugh Grant dormido durante el tie break del primer set generó una avalancha de reacciones: desde bromas ingeniosas y memes virales hasta montajes humorísticos e incluso algunas críticas, especialmente por el hecho de haberse quedado dormido justo detrás del palco real. No obstante, tras este breve descuido, el actor británico de 64 años logró recuperarse y volver a centrarse en el partido. En la recta final del encuentro, se le vio animado, disfrutando del ambiente deportivo y conversando distendidamente con su esposa, la productora de televisión Anna Elisabet Eberstein, con quien compartió sonrisas y gestos de complicidad que disiparon cualquier controversia.