La familia Ortega Mohedano se despertaba rota de dolor al conocer el fallecimiento de Michu, la expareja de José Fernando y madre de su hija, Rocío, quien fue hallada sin vida en su domicilio de Sanlúcar de Barrameda en Cádiz. Su entorno vive con inmensa preocupación que sucederá con la menor. La pequeña Rocío, que cumplió 8 años el pasado mes de mayo, vivía con su madre, para quien era el centro de su mundo y su principal prioridad: "Ella es la roca en la que me apoyo. Es el sol de mis días. Y, digan lo que digan, señor, me convirtió en todo lo que soy".
'Aquí estaré para animarte y apoyarte'
Dos días antes de su fallecimiento, José Fernando le dedicaba unas palabras llenas de orgullo a su pequeña Rocío, a quien puso este nombre en homenaje a su madre, Rocío Jurado, y abuela de la menor. "Me siento muy orgulloso de la gran hija que tengo, de lo mucho que te esfuerzas y aunque no todo sea sencillo, no te rindas, aquí estaré para animarte y apoyarte, tú puedes con todo mi princesa", publicaba hace apenas 24 horas junto a un álbum de fotos de la pequeña junto al resto de las mujeres de su vida, su hermana Gloria Camila, y la recordada Rocío Jurado. Nadie imaginaría que apenas dos días después sucedería esta gran tragedia en su familia.
La noticia ha conmocionado profundamente a sus seguidores y, en su última publicación, el hijo del torero ha despertado una auténtica oleada de mensajes de cariño y apoyo. "Lo siento mucho", "un abrazo enorme para ti hija. Y mucho amor para ella en estos momentos", "te acompaño en el sentimiento, ahora Michu os estará cuidando a ti y a tu pequeña desde el cielo" y "muchísima fuerza para sacar adelante a tu pequeña princesa" han sido algunas de las muchas muestras de cariño que ha recibido en las últimas horas.
Michu perdía la vida con 33 años. Aunque se desconocen las causas del deceso, la joven andaluza padecía problemas de corazón, concretamente una enfermedad congénita por la que había sido intervenida en varias ocasiones. La noticia de su fallecimiento ha conmocionado a todos, hasta tal punto que el silencio de sus seres queridos es el reflejo de un dolor y el profundo respeto que sienten hacia la pequeña que, con tan solo ocho años, se enfrenta al difícil camino de crecer sin su madre, y que ahora más que nunca necesita el apoyo y cariño de los suyos.
Un momento difícil que contrasta con el momento tan feliz que vivió la familia Ortega Mohedano hace apenas 15 días. José Fernando, acompañado de su hermana Gloria Camila y de su padre, Ortega Cano, asistieron a la boda de un familiar muy querido. "Ayer viví una de las bodas más bonitas y especiales de mi vida: la de mi primo Chema y Lorena", escribió Gloria Camilia tras asistir al enlace de Chema Esteban Ortega, sobrino de José Ortega Cano, y Lorena Elorriaga. "Cargué pilas de una forma que solo se consigue con momentos así, compartidos de verdad. Han sido unos días maravillosos en Bilbao, llenos de emoción, y este recuerdo me lo guardo para siempre", confesó. José Fernando, visiblemente más delgado, vestido de chaqué y abrazándose a su primo, de quien fue testigo en el enlace. Nadie hacía presagiar que días después la alegría de aquella celebración se vería ensombrecida por un acontecimiento tan doloroso e inesperado en su familia.