La música siempre le gustó, pero fue una casualidad lo que permitió a Bertín Osborne dedicarse de forma profesional a este sector que tantos buenos momentos le ha dado. Lo que comenzó siendo una noche de diversión entre amigos le permitió tener una oferta para lanzar su propio disco. Y ahí, casi sin saberlo, comenzó a escribir las primeras líneas de una carrera que se extiende hasta la actualidad. Lleva más de cuatro décadas recorriendo los escenarios de todo el mundo y poniendo voz a historias de amor y desamor. Y aunque pocas cosas le hacen tan feliz como el directo de los conciertos, ha decidido que ha llegado el momento de parar.
A principios de año ya contó en ¡HOLA! que la idea de retirarse le rondaba la cabeza y ahora es oficial. Bertín ha anunciado que dice adiós a los escenarios y ya está perfilando los planes para despedirse del fiel público que le ha acompañado incondicionalmente. "Quiero hacer una gira bonita, por los lugares más emblemáticos en los que he cantado y... despedirme", nos explicaba. La fecha que ha elegido es 2026 y tiene previsto hacer durante todo el año una gira por diferentes puntos del mapa. De esta forma, cantará por última vez sobre el escenario baladas, rancheras y otros temas que forman parte de la banda sonora de muchas personas, canciones que se recogen en su extensa discografía de 28 álbumes.
Durante una entrevista en la televisión de Ecuador ha hablado de sus planes de retirarse tras más de cuatro décadas en las que también ha tenido momentos difíciles. "Esta profesión que puede ser muy ingrata, para mí no lo ha sido, porque yo soy de reciclarme. Hace 15 años tuve un bache en la música y fui a la televisión”, ha dicho sobre su faceta más allá de la música. Es una personalidad muy querida en la pequeña pantalla gracias a espacios como Genio y figura, Lluvia de estrellas, El show de Bertín, Mi casa es la tuya y Tu cara me suena. En este último concurso participa actualmente y sorprende cada semana con sus imitaciones.
Es un artista multidisciplinar que ha sabido reinventarse, pero lo cierto es que en los últimos años ha experimentado dificultades para cantar por problemas de salud. Fue diagnosticado con Covid persistente, una afección que le provocaba faringitis y “una tos horrible que le dejaba el pecho y la garganta completamente destrozados”. Perdió todas las defensas y el sistema inmunológico no estaba preparado para combatir, pero tras esa etapa de oscuridad que tanto preocupó a sus íntimos, la luz volvió a abrirse paso y pudo seguir adelante con esa carrera a la que llegó por cuestiones de azar.
"Yo componía y me divertía, pero cantaba como jugaba al tenis o al fútbol. No era una afición desmedida. Lo que pasa es que una vez cantando en directo con un grupo de amigos en una discoteca muy conocida de Madrid, un señor pagó la entrada porque vivía encima y como no le dejábamos dormir decidió entrar a escucharnos. Era el presidente de una compañía de discos y me ofreció un contrato. 43 años después, aquí estoy", ha recordado en el citado país de América del Sur.
En los últimos tiempos también se ha volcado en su faceta empresarial y quiere dejar a sus hijos un negocio que pueda ayudarles el día que él no esté. "Quiero dejar una empresa que funcione y que ellos puedan seguirla, venderla o 'pulirla', pero que tengan algo sólido. Y no fama o discos... La música es mucho esfuerzo, muchos viajes, mucho foco... y me aleja de otras cosas que, en este momento, para mí, son más importantes", explicaba en ¡HOLA!
Este anuncio llega días después de convertirse oficialmente en el noveno conde de Donadío de Casasola, como figura en el Boletín Oficial del Estado. Ha heredado este título nobiliario que ostentaba su padre, Enrique Ortiz y López Valdemoro, que murió el pasado mes de octubre y era también conde de las Navas. "Me gustaba más el título de conde de las Navas, pero mi padre, en vida, me pidió que diera mi autorización para que le cediera ese título a mi hermana Chata. Y como entendí lo que quería mi padre y yo adoro a mi hermana María Teresa, di ese permiso", nos comentó el artista.
La vida sentimental de Bertín Osborne genera mucha curiosidad y ha remarcado que está soltero desde hace tiempo y por ahora no tiene intención de volver a ilusionarse: "Cualquiera que no me conozca diría que me falta alguien al lado. Llevo tres o cuatro años separado, divorciado, e incluso mis hermanas me lo dicen, pero yo estoy feliz solo. Te podría decir que a lo mejor alguien que me acompañe en algún momento, aunque sea solo para ver un partido de fútbol en la tele. Pero no lo echo de menos. Llevo tres o cuatro años solo. Bueno, solo no. La afición es la afición. Poco antes de morir le dije a mi padre que si esta afición nuestra se arregla con la edad y me dijo: no hijo, no, empeora".