Johnny Depp está volviendo a la primera plana en los últimos días tras abrirse, de nuevo, a la prensa. El pasado domingo se publicó una entrevista suya en The Sunday Times en la que profundizó sobre algunos aspectos de su vida, su familia y su errática relación con la intérprete Amber Heard, afincada en España. Con una sinceridad poco habitual, el actor no ha escatimado a la hora de poner los puntos sobre las íes.
El actor, conocido por sus roles en cintas como Piratas del Caribe o Charlie en la fábrica de chocolate, se ha dado un baño de masas en nuestro país tras una visita exprés a Madrid, ciudad en la que su exmujer vive con su hija. Ha visitado el Guernica, cuadro de Pablo Picasso, en el Museo Reina Sofía junto a Penélope Cruz; se ha paseado por el Hospital Niño Jesús de Madrid vestido de Jack Sparrow -una jornada inolvidable para los pequeños del ala de oncología-; y no ha dudado en hablar sobre una de las polémicas que resuena en su vida desde hace un par de años.
“¿Cuáles fueron mis primeras aproximaciones a eso que llamamos ‘amor’? Sin duda, torpes o poco claras”, confesó al medio británico. Depp y Amber Heard se conocieron en 2009 durante el rodaje de Los diarios del ron, cuando ella tenía 22 años y él, 45. El flechazo fue inmediato, pero su romance no empezó hasta tiempo después, casándose en 2015 y divorciándose al año de convertirse en marido y mujer. La actriz alegó diferencias irreconciliables y solicitó una orden de alejamiento. Su separación sería el inicio de una batalla legal que se alargó durante años y que acabó en los juzgados.
Johnny habla ahora con una mirada introspectiva sobre cómo se enamoró: “Si eres un iluso como yo, a veces miras a una persona a los ojos y ves algo de tristeza, una cierta soledad y sientes que puedes ayudarla”, explicó. “Pero ningún buen acto queda impune, porque hay personas que, cuando intentas amarlas y ayudarlas, acaban mostrándote qué era exactamente eso que viste en su mirada. Esa perturbación se manifiesta de otras formas”.
Echa de menos ser 'papi'
Además de profundizar en una etapa de su vida a la que quiere dar carpetazo, Johnny Depp se ha abierto en canal a la hora de hablar de su rol como progenitor. "Yo era papa", recuerda el actor a The Sunday Times. "No puedo explicar cuánto me encantaba que me llamasen así. Después, de repente, papa se fue por la borda y ya me llamaban dad", se lamentaba, haciendo referencia a un cambio de palabra que, en nuestro idioma, sería como pasar de papi a papá. Depp es padre de dos hijos, ambos fruto de su relación con la modelo y actriz Vanessa Paradis: está Lily-Rose, de 26 años, y Jack, de 23. El paso del tiempo ha hecho mella en el actor: "Los años se alejan de nosotros, ¿no? [...] Tengo el síndrome del nido vacío", confesaba a la cabecera.
Una nuevo comienzo para Amber Heard
Las declaraciones sobre Amber Heard y su familia coinciden, además, con la nueva etapa de la intérprete, que ha puesto tierra de por medio entre ambos para comenzar una nueva era en la industria audiovisual. La estadounidense, de 39 años, llevaba trabajando en la televisión y en el cine desde el año 2004, empezando con la serie Friday Night Lights. Su vida como estrella de Hollywood ha sufrido un parón en los últimos años a causa de su juicio mediático con Johnny Depp, pero todo está volviendo a su cauce y a la normalidad que atesoraba antes de su divorcio.
Heard debutará en los escenarios en el estreno mundial del nuevo proyecto del dramaturgo Jeremy O. Harris, Spirit of the People, tal y como lo ha contado Variety. El estreno mundial tendrá lugar en el Festival de Teatro de Williamstown 2025, en Massachusetts. El evento tendrá lugar del 17 de julio al 3 de agosto, aunque todavía se desconoce cuándo se estrenará la obra. Poco más se sabe acerca del personaje al que la actriz dará vida, aunque se une a un reparto que incluye a Brandon Flynn y Lío Mehiel, anunciados este mismo lunes junto a su fichaje.