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El diseñador de moda y escritor, Juan Avellaneda, ha presentado su nuevo proyecto literario, Flashing Lights, rodeado de amigos, compañeros y gente de la calle que quisieron que el diseñador le firmara un ejemplar. Una de las que apareció por sorpresa fue la infanta Elena, que no quiso perderse en el evento que se celebró en la tarde del martes en la tienda See Iou que tiene en la calle Génova de Madrid. Además de la hija de don Juan Carlos y doña Sofía, Avellanada estuvo acompañado de otra de sus grandes amigas y musas, Nieves Álvarez; en una tarde llena de cultura y emociones.
© avellaneda_euEl diseñador ha querido compartir en sus redes sociales unas imágenes de la firma de libros con el siguiente texto: "Ayer en Madrid viví una tarde que no voy a olvidar nunca. Presentar Flashing Lights en la tienda de See Iou , rodeado de tantísima gente regalándome tanta buena energía, fue realmente emocionante. Gracias a todos los que vinisteis, hicisteis cola, esperasteis con paciencia y compartisteis historias, emociones y abrazos. Sigo alucinando con la cantidad de personas que os acercasteis y con el cariño que me disteis.
© avellaneda_eu
© avellaneda_euTremendamente agradecido
El modisto se ha desecho en halagos y agradecimientos a sus amigas: "De verdad: Gracias y gracias también a mujeres tan increíbles como la infanta doña Elena y mi adorada Nieves Álvarez, por estar ahí, por acompañarme y por formar parte de ese regalo tan especial que fue ayer. Sin duda, los sueños se celebran mejor cuando se comparten. Gracias también a Susana y a Jorge por hacerlo posible y, por tanto, a todo el equipo de See Iou.
© avellaneda_euLa versión de Juan Avellaneda de 'El diablo se viste de Prada'
Nieves Álvarez, gran amiga del diseñador, ya presentó el nuevo libro del modisto, que es una novela basada en hechos reales que "construye el retrato íntimo de una joven que busca su lugar en un universo donde brillar puede ser una forma de resistencia". Para celebrarlo, la modelo compartió un original y divertido vídeo recreando la icónica escena de la película en la que Meryl Streep le exige a su asistente, interpretada por Anne Hathaway, que consiga un ejemplar de Harry Potter para sus hijas.
