Tras su expulsión de Supervivientes 2025, Pelayo Díaz ha regresado a los platós de Mediaset envuelto en emoción y rodeado de los suyos. El diseñador ha vivido uno de los momentos más intensos desde su salida de Honduras, con un reencuentro que lo ha dejado sin palabras: su pareja actual, Gal Marom, y su exmarido, Andy Macdougall, lo esperaban al otro lado de la puerta.
Nada más llegar a las instalaciones de Telecinco, Pelayo se reencontraba con su madre, Elena Zapico, su mayor apoyo durante el concurso y firme defensora en los debates televisivos. “Es la mejor madre del mundo”, decía visiblemente emocionado. La conexión entre ambos fue inmediata. Carlos Sobera no dudó en alabar su papel: “Tu madre es maravillosa”.
“Esto parece Navidad, no me lo puedo creer”
La sorpresa no había hecho más que empezar. Carlos Sobera anunció que otra persona muy importante quería saludarle. El presentador insinuó que se trataba de Carmen Alcayde, pero quien apareció en realidad fue su pareja, Gal Marom. Pelayo se fundió en un largo abrazo con él: “Esto parece Navidad, no me lo puedo creer”.
Instantes después, otro rostro familiar se unía al reencuentro: su exmarido, Andy Macdougall. Lejos de la frialdad que podría esperarse en un encuentro entre exparejas, ambos compartieron palabras de cariño y respeto. “Andy fue quien más me animó a venir a Supervivientes. Sin él, seguramente hoy no estaría aquí”, confesó el estilista. El publicista argentino, por su parte, respondió: “Estuvimos un mes sacando al perro y hablando de lo que iba a pasar. Lo hiciste increíble, estoy orgulloso”.
Las palabras de Carlos Sobera que lo desarmaron
El momento más emotivo de la noche llegó de la mano de Carlos Sobera, que dedicó a Pelayo unas palabras que calaron hondo en él. “Tienes que sentirte muy orgulloso del concurso que has hecho, porque ha sido excepcional. Brutal. Y cuentas con la admiración de mucha gente por lo bien que lo has hecho”, expresó.
Pelayo no pudo contener las lágrimas. Agradecido, respondió con la voz entrecortada: “Gracias por tus palabras y gracias a todo el público. Estoy deseando estar ahí con vosotros”. En ese momento, el estilista recordó todo lo vivido en Honduras y lo que más había echado de menos: “Se pasa mucho tiempo pensando en la familia. En esos momentos en los que no estuviste cuando deberías haber estado. Estoy deseando besar a mi novio y abrazar a mi ex Andy”.
Pelayo Díaz, de 38 años, ha sido uno de los participantes más destacados de esta edición. Conocido por su faceta como estilista y colaborador televisivo, el asturiano ha mostrado en la isla su lado más humano, superando retos físicos y emocionales. Su sinceridad, capacidad de adaptación y compañerismo han sido valorados tanto por la audiencia como por sus compañeros.
Su paso por Supervivientes 2025 ha sido para él una experiencia transformadora. “He aprendido mucho, sobre todo de mí mismo”, dijo en una de sus últimas intervenciones desde los Cayos Cochinos. Ahora, de vuelta en España, se muestra agradecido por el apoyo recibido y satisfecho con su paso por la aventura.