Alba Flores tiene unos cuantos premios importantes (el Ondas, el Platino, el Iris, el de la Unión de Actores...) en su brillante currículum como actriz. Los cosechó principalmente gracias a su excelente trabajo en series de gran éxito como Vis a Vis o La casa de papel, donde dejó huella con sus personajes de Saray y Nairobi respectivamente. Ahora, acaba de recibir otra distinción que, en este caso, no tiene absolutamente nada ver que con las anteriores, pero que a ella le ha hecho la misma ilusión. Toda una alegría en una semana clave para ella y su familia, marcada por la tristeza, la nostalgia y los homenajes, puesto que este sábado se cumple el 30º aniversario de la trágica muerte de su padre, el recordado Antonio Flores.
La intérprete de 38 años se ha llevado este año el Premio Rayo Verde, creado por la Academia de Cine junto a la organización Greenpeace para reconocer a profesionales del séptimo arte por su compromiso con los valores medioambientales y sociales. "Por su papel activo y visible en campañas de protección de la naturaleza, tanto a nivel nacional como internacional, y su contribución a la conservación del planeta", destaca el jurado sobre la protagonista de Punto Nemo (Amazon), una serie-thriller de misterio que precisamente aborda la crisis climática y donde ella da vida a una mujer que lucha por el ecosistema.
En su cuarta edición, las dos instituciones que otorgan este galardón también ha señalado la capacidad de Alba "para movilizar a la ciudadanía y a los responsables políticos, utilizando su proyección pública para amplificar el mensaje y promover acciones concretas" en favor de esta causa. Ella, por su parte, ha dicho que "me siento muy honrada y muy agradecida por este premio. Ojalá pudiera hacer más". Expone que "más allá de lo que puedo aportar como ciudadana, aspiro a hacer las cosas de otra manera en mi trabajo". En este sentido, apunta que "me gustaría que las producciones fueran cada vez más sostenibles, eligiendo qué historias contamos y cómo las contamos" cuando están relacionadas con el cuidado de la Tierra.
Su 'entrevista' al planeta cuando era niña
De la misma manera, la nieta de 'La Faraona' ha echado la vista atrás y recordaba una redacción del colegio que hizo con 10 años, cuando imaginó que hacía una entrevista al planeta en la que le preguntaba por qué está enfermo. "Yo contestaba que sí, que estaba mal porque contaminan los lagos, los ríos, el aire...". Ya de adulta, la actriz ha participado en varias iniciativas de Greenpeace, con los que viajó el año pasado a la Reserva Marina de Galápagos. Con esa expedición, que tuvo lugar en febrero de 2024, se subió a bordo del Arctic Sunrise para ser testigo directo de la excepcional belleza y también de las amenazas que sufre la zona.
Desde este espectacular enclave, junto a un equipo de científicos, la sobrina de Lolita y Rosario Flores observó de primera mano la abundancia y diversidad de especies que allí habitan. Por ello, pidió a los Gobiernos de todo el mundo que aceleraran el proceso de ratificación del Tratado Global de los Océanos. Sin embargo, más allá de este espacio protegido, "enormes flotas pesqueras industriales continúan devastando la vida marina, lo que tiene impactos negativos directos en el interior", denunciaban desde dicha entidad. En nuestro país, Alba también ha defendido la preservación del Parque Nacional de Doñana, abogando por soluciones sostenibles y respetuosas con el entorno.
Por suerte, no es ella el único rostro del celuloide que tiene esta faceta más allá de su profesión, puesto que cada vez hay más nombres del audiovisual español que se suman "a luchar por una sociedad más verde y más justa", dice al respecto la Academia de las Ciencias y las Artes Cinematográficas. Sobre ello, la prima de Elena Furiase remarca también que "los compañeros y compañeras más jóvenes vienen pisando fuerte. Están muy comprometidos porque la conciencia medioambiental forma parte de su educación". Cree que "a nada que estés abierto, te dejas permear por lo que hacen otros artistas, y cada vez hay más personas que están tomando conciencia, también las instituciones, aunque a veces estas dejen mucho que desear", sentenciaba.