Uno de los ingredientes del éxito de Renacer, la serie turca que arrasa cada semana en Antena 3, es la química innegable entre sus protagonistas. Demet Evgar y Elit Andaç Çam interpretan a Bahar y Çağla, dos amigas inseparables en las buenas y en las malas, como los matrimonios, por lo que, aunque sus relaciones sentimentales no siempre hayan salido como se merecen, son afortunadas porque cuentan con el amor incondicional de la otra. Juntas son capaces de superarlo todo. En la ficción su conexión traspasa la pantalla... pero cuando las cámaras se apagan, también. Acaban de demostrarlo con su último plan, una salida improvisada que han disfrutado como niñas.
Las jornadas de grabación de las series en Turquía son maratonianas, comienzan muy temprano y pueden extenderse hasta bien entrada la noche, llegando a superar las 12 horas. Los actores saben cuándo entran al set, pero nunca cuándo saldrán. Por eso, cuando el rodaje les dio una pequeña tregua y la jornada terminó antes de lo habitual, Demet y Elif, como si de sus personajes se tratara, decidieron aprovechar el tiempo libre y hacer un plan juntas en lugar de irse a casa.
Lo que parecía una salida cualquiera se transformaba en algo mucho más espontáneo: en vez de ir de compras, dar un paseo o tomar algo, se dirigían a un parque cercano y se subían a los columpios. Juntas, se montaban en un balancín con forma de caballito, riendo y bromeando, demostrando que la edad solo es un número y que siempre debemos mantener vivo ese niño que llevamos dentro. No tardaban en inmortalizar el momento. Era Elif quien lo compartía en su perfil, acompañándolo de una frase de Demet: "Cuando el set termina temprano, nosotras…".
El columpio, pensado para cuatro personas, parecía hecho a su medida. Aunque solo eran dos, ellas se bastaban. Sentadas la una frente a la otra, subían y bajaban en sus caballitos de madera a carcajada limpia. Las actrices vestían ropa cómoda y desenfadada —Demet una sudadera camel, mallas estampadas azules y unas zapatillas de deporte, mientras que Elif optaba por un pantalón negro ancho, botas deportivas de cordones y un gran pañuelo azul—, dejando claro que la intención no era posar, sino simplemente pasar un buen rato. La escena, capturada en un breve vídeo, no mostraba a dos compañeras de rodaje, sino a dos amigas disfrutando del momento, alejadas del frenético ritmo del set y devolviéndolas, aunque fuera por un rato, a la infancia.
No es la primera que somos testigos de la conexión tan especial que existe entre ellas. Tan solo unos días antes, ambas compartían unas fotos juntas en las que aparecían haciendo muecas, sonriendo y derrochando complicidad. La publicación venía acompañada por una frase con mucho humor: "¿Qué somos, chicas de portada o algo así?". Una muestra más del buen rollo que comparten fuera del set de Renacer.
Y es que, si algo ha conquistado al público, además del guion, ha sido la unión entre sus dos protagonistas femeninas. La relación entre Bahar y Çağla se ha convertido en uno de los pilares emocionales de la serie. Su vínculo, cargado de comprensión, ternura y lealtad, ha conectado de forma especial con la audiencia, que ve en ellas un ejemplo de amistad verdadera.
Pero esa conexión no es algo reciente ni surgido por casualidad durante la grabación de una de las series más vistas de la temporada en Turquía. Su historia compartida viene de hace tiempo: en 2017 coincidieron en la película Sofra Sırları, donde, curiosamente, daban vida a personajes enfrentados. A pesar de ello, de aquel rodaje nacía un vínculo que ha crecido con los años y que hoy se refleja de forma natural en cada escena que comparten.