La tensión vivida el miércoles en La familia de la tele ha provocado una respuesta inmediata por parte de la cúpula del programa. En pleno directo, Belén Esteban sorprendió con una declaración contundente. "No me gusta el formato. No me gustan los temas. Estoy amargada y quiero irme”, confesó, abriendo la puerta a una crisis interna.
El resto del equipo no tardó en reaccionar. Kiko Matamoros admitió la decepción por las bajas audiencias, aunque se mostró firme en seguir adelante: "Entiendo el sentimiento de frustración, Belén, porque no estamos en los niveles que esperábamos, pero abandonar sería poco profesional".
Aitor Albizua Inés Hernand también se pronunciaron. "No sé hacer prensa del corazón", reconoció el presentador. La presentadora, por su parte, admitió que ella no conoce a muchos de los personajes de los que se habla en el programa. "Yo entendía que se iba a diversificar más y se iban a incorporar otras temáticas, y por eso me sumé". Pese a ello, ambos se mostraron optimistas. "Aunque ahora estemos así, sigo confiando en la ilusión, el talento y el trabajo de todo un equipo que hemos intentado que esto salga de la mejor manera posible", dijo Albizua. "Por hacer una crítica constructiva: somos líderes en audiencia joven", puntualizó Hernand.
Tras esta auténtica terapia de grupo ante la audiencia, Adrián Madrid y Óscar Cornejo, directores de La OSA Producciones, productora de La familia de la tele, se reunieron con altos cargos de Televisión Española para salvar un proyecto que llegó a la cadena pública con mucha ilusión, pero cuya acogida ha ido enfriándose progresivamente.
En tiempo récord, los responsables replantearon el formato y aplicaron los primeros cambios: María Patiño conducirá en solitario el primer bloque, enfocado en temas personales y de corazón; mientras que Albizua y Hernand asumirán el segundo bloque, dedicado a asuntos sociales y de actualidad.
"No sé qué pasará a partir de mañana, pero hoy sí. Tras la catarsis que todos vivimos el miércoles, en La familia de la tele vamos a vivir cambios. En las familias cada uno tiene su papel, y a veces se fragmentan. Por eso hoy mis compañeros Inés Hernand y Aitor Albizua serán los encargados de encabezar el segundo acto del programa a partir de las 19:00h", explicó Patiño a los espectadores. "Estamos escuchando las críticas, todas las cosas que nos piden, y vamos a hacer un bloque un tanto distinto", comenzó Hernand, avanzando junto a Albizua uno de los asuntos principales de la jornada: la agresión a una joven de Madrid que salió a defender a un compañero de colegio.
Con estos ajustes, La familia de la tele busca reconectar con su público y, al parecer, podría haberlo logrado. El jueves, en su primer tramo, el magacín alcanzó un 7,5% de cuota de pantalla con 659.000 espectadores, mientras que el segundo bloque logró un 6,4% de share y reunió a 498.000 televidentes. Estos datos suponen una tímida subida respecto al miércoles, aunque habrá que esperar para comprobar si esta tendencia al alza se consolida o, por el contrario, la deriva obliga a tomar medidas aún más drásticas.