Paul Hogan, protagonista de la mítica película Cocodrilo Dundee, ha reaparecido después de mucho tiempo alejado de los focos. El actor australiano, de 85 años, asistió al programa Today para hablar sobre la nueva versión censurada de su icónica película Crocodile Dundee: Encore Cut, en la que se muestra el filme original con cortes porque hoy en día se cree que es "material sensible". Hogan no solo reflexionó sobre el legado de la película, sino que también terminó compartiendo detalles sobre su familia.
Paul Hogan, conocido cariñosamente como ‘Hoges’, ha hecho de Estados Unidos su hogar durante años, aunque admite que le encantaría regresar de forma permanente a Australia. No obstante, por ahora ha decidido quedarse en Los Ángeles por su hijo menor, Chance, de 27 años. Al principio evitó profundizar en los detalles, pero finalmente admitió que Chance ha enfrentado diversas dificultades a lo largo de los años.
Cuando se le preguntó sobre el estado actual de su hijo, Hogan aseguró: "Está bien. Está mejor de lo que parece". Reconoce que los tabloides lo persiguen constantemente, y señala que su hijo, consciente de ello, juega deliberadamente con su imagen pública. "Recibe mucha información sensacionalista, pero es una persona terrible porque sabe que lo están vigilando y les finge algo". Chance es su hijo con su segunda esposa, Linda Kozlowski, su coprotagonista en Cocodrilo Dundee. Paul Hogan es padre, además, de cinco hijos con su primera mujer, Noelene Edwards: Brett, Clay, Scott, Todd y Lauren.
El joven de 27 años compartió preocupantes vídeos en sus stories en los que bebía vino y se mostraba en estado ebrio. "Esta es mi vida. Esto es a lo que se ha reducido", balbuceaba Chance mientras bebía sorbos de su copa de vino. Entonces se acerca a la cámara y señala: "Por favor. Por favor, mátame. Te lo suplico".
La icónica estrella del cine dejó atrás su país natal tras el éxito arrollador de Cocodrilo Dundee, la célebre comedia de acción que le valió una nominación al Oscar al mejor guion original y un Globo de Oro como mejor actor. En los años 90 se instaló con su esposa Linda en Los Ángeles. Su hijo Chance, un joven aspirante a músico, ha vivido con su padre desde el divorcio de sus progenitores en 2014, tras 24 años de matrimonio. En los últimos meses, su nombre ha aparecido con frecuencia en los titulares debido a un comportamiento inquietante y un tanto contrvertido. A finales del año pasado, unas imágenes preocupantes lo mostraban deambulando por los callejones de Venice Beach con cerveza en mano, cerca de la casa que comparte con su padre.
Su célebre progenitor ha restado importancia a la situación. En una entrevista con Daily Mail, Paul, padre de seis hijos, se mostró tranquilo al respecto. Al ser consultado sobre si estaba preocupado por Chance, el actor respondió con una sonrisa despreocupada y un leve movimiento de cabeza: "No. Son un montón de cosas inventadas, y muchas de ellas las hace a propósito".