José Luis Martínez-Almeida, muy feliz rodeado de sus hermanos en el día de su boda

A las puertas de la iglesia, el alcalde Madrid confesaba cómo se sentía antes de dar el 'sí, quiero' a Teresa Urquijo

Por Ana Dorado

Bajo un cielo encapotado y en medio de una gran expectación, con cientos de curiosos esperando, ha llegado a la parroquia del Sagrado Corazón y San Francisco de Borja el gran protagonista de la jornada: José Luis Martínez-Almeida. El alcalde de Madrid, recibido entre gritos de "guapo" y "torero", hacía acto de presencia a las 11:28 horas tras bajar del coche que le había trasladado al lugar. Una vez allí, accedía al templo en el que iba a dar el "sí, quiero" a Teresa Urquijo y al que han ido llegando poco a poco los invitados. A las puertas de la iglesia, el edil confesaba cómo se siente en su gran día.

Los invitados a la boda de José Luis Martínez-Almeida y Teresa Urquijo

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"Muy emocionado y muy nervioso", decía el novio ante la prensa sobre su estado de ánimo. De hecho, ha revelado que no ha sido capaz de dormir esta noche. "Como sigamos así, voy a echar más agua que Neptuno", ha declarado con humor. El alcalde ha definido el día que está viviendo como "el más feliz de mi vida, sin duda", y se ha dirigido también a los ciudadanos que se han congregado para verle llegar: "Estoy muy agradecido a todos ustedes por estar aquí", ha comentado, apreciando con un gesto las felicitaciones que ha recibido a las puertas de la parroquia.

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Para el día de su boda, el novio ha escogido un traje de máxima etiqueta diseñado para reflejar su personalidad. Se trata de una creación de la Sastrería Fernández Prats, que dedica alrededor de 60 horas en crear cada una de sus piezas. La pieza central de es una levita de color gris marengo que fusiona el estilo inglés y español y con detalles que revelan el trabajo artesanal, desde el distintivo reborde en la manga, sello de la casa, hasta los botones de nácar del chaleco en tono vainilla. "Lo que a él le ha hecho elegir esta casa es que somos empresa pequeña, somos taller, quiere apostar por las sastrerías tradicionales", declaraba recientemente Joaquín Fernández Prats sobre la elección de José Luis Martínez-Almeida. Además, el prestigioso camisero Oscar Montero ha sido el encargado de confeccionar dos camisas a medida para completar el look.

El sastre que ha confeccionado el chaqué de Almeida: 'Ha pedido un detalle especial'

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El enlace ha congregado a miembros de la realeza y aristocracia, a la alta sociedad y a la élite empresarial  y política de nuestro país. Hasta la parroquia del Sagrado Corazón y San Francisco de Borja, ubicada en la calle Serrano, en plena Milla de Oro madrileña, han llegado también otros allegados como los hermanos de Almeida: Casilda, Alfonso, Ángela, Magdalena y Rafael. La mayor de ellos, Casilda, ha sido la encargada de ejercer de madrina puesto que sus padres, Rafael Martínez-Almeida y Ángela Navasques, fallecieron en 2012 y 2019 respectivamente. El alcalde ha posado con su familia, sonriente y visiblemente feliz ante la perspectiva de sellar su historia de amor con Teresa Urquijo rodeado por sus seres queridos. 

“Lo hemos vivido con muchísima alegría por varias razones. La primera es que ha encontrado el amor, su media naranja. La espera ha valido la pena porque Teresa es una persona maravillosa y llena de bondad. Y también se ha emocionado porque nuestros padres están en el cielo, él era el ojito derecho de mi madre y seguro que ha tenido algo que ver con esto. Es un día de mucha alegría", ha explicado Magdalena a la salida de la iglesia.  

Pablo, sobrino del alcalde e hijo de Magdalena, también ha dado más detalles sobre esta emotiva ceremonia. “Llevaba muchos años soltero y esto es un milagro que solo ha podido hacer mi abuela. Ha sido todo muy bonito, sobre todo cuando una chica de Hakuna (grupo musical) ha cantado una canción que se llama Madre, de la Virgen, y nos ha emocionado. Ha llorado mucho cuando ha visto entrar a Teresa en la iglesia. Lo más importante es que sean muy felices y les deseamos lo mejor". 

El rey Juan Carlos, con las infantas Elena y Cristina, acude a la boda del alcalde de Madrid y Teresa Urquijo

Entre las personas que acompañan a los novios se encuentra el rey Juan Carlos -quien, de hecho, también ha posado con el novio-, así como la infanta Elena, que ha llegado con sus hijos Felipe y Victoria de Marichalar, y la infanta Cristina, con su hijo Juan Urdangarin. Cabe recordar que la Familia Real española está emparentada con Teresa Urquijo puesto que su abuela materna, Teresa de Borbón y Borbón, casada con Íñigo Moreno de Arteaga, es prima del anterior jefe del Estado.

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En la lista de invitados, Carmen Fernández de Araoz, conocida como Piru Urquijo y la abuela paterna de la novia; Pedro de Borbón-Dos Sicilias, duque de Calabria y primo de la madre de la novia; Pedro López-Quesada con Cristina de Borbón-Dos Sicilias y su hija Victoria de Borbón-Dos Sicilias, esta última junto a su prometido Enrique Moreno de la Cova. Tampoco han faltado amigos como Luisa Bergel, hija del financiero Jaime Bergel, exdirector general para España del departamento de Banca de Inversión de Goldman & Sachs, expresidente de Merrill Lynch para España y Portugal, y cofundador de Gala Capital, propietario de la firma Jimmy Choo. La empresaria, de la que se dice que presentó a José Luis y Teresa, es también íntima de Tamara Falcó, organizó una divertida despedida de soltera a la novia en Milán y se casó el año pasado con Cristian Flórez en Cádiz. 

Teresa Urquijo se casa con un vestido bordado de cola desmontable que homenajea a su madre y abuela

Ya convertidos en marido y mujer, la celebración se ha trasladado a El Canto de la Cruz, ubicada en la localidad de Colmenar Viejo y llena de recuerdos para la novia ya que es propiedad de sus abuelos maternos,los marqueses de Laserna. Se ha preparado todo con la idea de celebrarlo al aire libre en los impresionantes jardines de esta finca enclavada en plena Sierra de Guadarrama con 25 hectáreas. Es aquí donde la Princesa cría sus caballos de purasangre árabe, una auténtica referencia mundial para los amantes del mundo ecuestre. El menú lo ha servido Lhardy, uno de los restaurantes con más solera de la capital.