El primer gran enlace del año

Tamara Falcó y la infanta Elena, entre los invitados a la aristocrática boda de Felipe Matossian Falcó

El sobrino nieto del recordado marqués de Griñón se ha casado en la iglesia de las Calatravas de Madrid con Ina Morenés

Por Lucía Fernández

Una boda en la familia Falcó es siempre sinónimo de una gran cumbre de la aristocracia e, incluso, de la realeza española, como la que ha tenido lugar este viernes en Madrid para celebrar el 'sí, quiero' de Felipe Matossian Falcó, marqués de Pons, e Ina Morenés Allende-Salazar, tal y como adelantó en primicia ¡HOLA!. El novio es sobrino nieto del recordado marqués de Griñón y, por tanto, primo de Tamara Falcó, y la novia es hija de Antonio Morenés y María del Carmen Allende-Salazar, marquesa de Velada. Han estado arropados por sus familiares y también amigos como la infanta Elena y el duque de Alba, además de otras personalidades invitadas al que es el primer gran enlace del año. 

 

Loading the player...

Vídeo: Europa Press

Los looks de las invitadas a la boda de Felipe Matossian Falcó

Los recién casados a la salida de la Iglesia de las Calatravas

Felipe Matossian e Ina Morenés, felices tras el 'sí,quiero'

La tarde se presentaba lluviosa y no demasiado cálida en la capital. Dicen que da suerte y, aún así, el agua dio un respiro en el arranque de la esperada celebración. Como manda la tradición, el novio, con un elegante chaqué, ha sido el primero en llegar a la bella iglesia de la Concepción Real de Calatrava, conocida como la de las Calatravas, junto a su madre Carla Falcó, con vestido color teja, la mantilla con peineta propia de las madrinas, e impresionantes joyas. Este templo del siglo XVII, que perteneció al antiguo convento de la Concepción Real de las monjas comendadoras de la Orden de Calatrava, se encuentra al comienzo de la calle de Alcalá, una de las principales arterias de la capital, por lo que la alegría que se respiraba en los aledaños de la iglesias se trasladaba a los sorprendidos viandantes que no contaban con un auténtico desfile de aristócratas a escasos metros de la puerta del sol. 

La madre del novio y espectacular madrina, Carla Pía Falcó

Ina Morenés llega del brazo del orgulloso padrino

La novia, del brazo del orgulloso padrino, ha hecho su entrada con un precioso vestido sencillo y atemporal de Navascues, la misma firma que eligieron para su gran día Belén Corsini o Lulú Figueroa. Confeccionado en un tejido ligero con falda sin cola en línea 'A' y manga francesa con botones en el puño, le ha dado un toque más invernal sumándole un chaleco de tweed con cuello camisero y detalles desflecados. En la mano portaba un ramo con dos rosas blancas muy en línea con la elegancia y sencillez del look nupcial. En su apuesta por el minimalismo no ha lucido una tiara familiar del gran joyero de los falcó como la tiara de diamantes que lució Amparo Corsini, ni siquiera ha recurrido al clásico velo, sino que ha preferido llevar un favorecedor moño bajo dejando ver unos pendientes de brillantes con forma de abanico. 

Tamara Falcó, con un look muy primaveral

Íñigo Onieva a su llegada a la iglesia

La infanta Elena también se encontraba entre los invitados

El primer encuentro de los novios no se produjo ante el altar, sino a las puertas de la iglesia, junto a los padrinos, donde se saludaron con emoción compartida solo minutos antes de comenzar la ceremonia de la que saldrían convertidos en marido y mujer. "Estamos muy felices", estas han sido las primeras palabras de Felipe Matossian ya del brazo de su esposa, que agradecía la felicitación de los medios que les esperaban a la salida. Con una sonrisa, los recién casados se han dirigido a un vehículo que les llevaría a la esperada celebración con todos los invitados. 

Descubrimos a la nueva generación de la familia Falcó

Felipe Matossian e Ina Morenés, rumbo a la celebración posterior

No podía faltar una nutrida representación de la familia Falcó en la larga lista de invitados al enlace. Los hijos del fallecido marqués de Griñón, Xandra y Manuel Falcó, con su mujer Amparo Corsini, muy elegante con un vestido de tweed en tonos azules, han sido de los primeros en llegar. Allí se han encontrado después con su hermana Tamara Falcó, junto a Íñigo Onieva, que han entrado a la iglesia por separado. La actual marquesa de Griñón ha apostado por el look más primaveral con un vestido largo y ajustado de Rixo de estampado floral. Se trata de regalo de su suegra Carolina Molas, tal y como ella misma ha contado a los periodistas.

Tamara Falcó e Íñigo Onieva: las imágenes más románticas que desmienten su crisis

Tamara Falcó e Isabelle Junot, al finalizar la ceremonia

Los marqueses de Cubas, espectaculares a su llegada

Miguel Morenés hablando a su llegada con Isabel Muñoz Rojas, cuñada del novio

Otro de los primos del novio, Álvaro, hijo de Fernando Falcó que también era tío abuelo de Felipe, ha ido con su esposa Isabelle Junot. La marquesa de Cubas ha optado por un vestido palabra de honor con corpiño negro y una gran falda en  azul petroleo al más puro estilo años 50 de De la Cierva y Nicolás. La infanta Elena, que ha sido recibida muy cariñosamente por Carla Falcó, la madre del novio, se ha decantado por unos pantalones anchos puesto que aún lleva la bota ortopédica con la  que se recupera de una lesión producida mientras hacía equitación. 

Manuel Falcó y su mujer Amparo Corsini

Xandra Falcó, marquesa de Mirabel

El duque de Alba, Carlos Fitz-James Stuart

Felipe es hijo del jinete Jaime Matossian y Carla Falcó, quien le cedió el marquesado de Pons. Es, además, nieto de Felipe Falcó, el hermano de Carlos y Fernando Falcó tristemente fallecido en un accidente de tráfico cuando solo contaba con 33 años. Con esta genealogía, era difícil escapar de la pasión por el campo y la caza que corre por las venas de la familia -su bisabuela Hilda Fernández de Córdova, duquesa de Montellano, fue una de las primeras mujeres cazadoras de España-. Según él mismo cuenta en su perfil público, se dedica a organizar viajes organizados de caza por el mundo como parte del equipo de la empresa Great European Hunts.

Por su parte, Ina trabaja como diseñadora de interiores en el estudio Luisa Olazábal, fundado en 2003. Después de estudiar en CUNEF y completar su formación con un master en cooperación internacional y desarrollo de proyectos en la Fundación Ortega y Gasset, decidió reorientar su carrera profesional especializándose en diseño de interiores en la prestigiosa Escuela de Diseño Parsons, en Nueva York.