Carmen Lomana, el hada madrina secreta de Carla Hinojosa
La influencer nos desvela que es la persona que más le ha impresionado y que ha sido como su segunda madre en Madrid
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Ella es una de las primeras reinas de las redes sociales de nuestro país. Carla Hinojosa comenzó su andadura en 2012 y, poco a poco, se ha ido abriendo paso como precursora de tendencias, con su estilo elegante y sofisticado. Nacida en Barcelona y licenciada en Periodismo y en Publicidad y Relaciones Públicas, siempre tuvo claro que lo suyo era el mundo de la moda y se preparó para trabajar en él. “Jamás me he visto fuera del mundo de la moda, estudié comunicación para ser editora de una revista de moda y con Instagram logré tener mi propio canal de comunicación”, asegura.
Gracias a su trabajo como influencer, a su agencia de comunicación y producción y a la firma de moda de su familia, Brillant, ha tenido la oportunidad de conocer a muchos rostros conocidos y mujeres que le sirven de inspiración a la hora de vestir. “Muchas veces conoces a gente en eventos fuera de España a la que admiras muchísimo pero no llegas a conocerlas en profundidad. Casi siempre te sorprende que suelen ser personas cercanas y normales y te sientes bien con ellas. Por ejemplo, Olivia Palermo o Anna dello Russo”, nos dice.
Sin embargo, tiene muy claro quién es la persona que más le ha impresionado y a la que sí ha podido conocer muy bien: “Sin duda, Carmen Lomana. La he admirado siempre y siempre me he sentido muy identificada. La veía en entrevistas en televisión y la entendía tanto… siempre me han hecho la vida imposible en el colegio por ser “pija”, tanto alumnos y como profesores. Luego cuando te conocen te dicen “jamás hubiese dicho que eras así”, pero es que no todo el mundo es capaz de conocer antes de juzgar. Con ella pasa esto y luego la conoces y es maravillosa”.
Carla se mudó hace poco más de dos años a Madrid, una ciudad que le ha enamorado por su vida y el carácter de la gente, y en esta etapa en la capital, Carmen Lomana se convirtió en una especie de hada madrina para ella. “Llegué a Madrid y me cuidó como una madre. Recuerdo haber estado enferma y ella hacer que me mandasen libros, revistas y comida a casa… eso no lo hace todo el mundo. Sé que se preocupa por mí de un modo sincero”, confiesa.
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