Tras las inesperadas expulsiones de Nani y Ancor en la última gala de Maestros de la costura los aprendices del talent de Televisión Española llegaban al ecuador metidos en la dinámica de la competición, aunque sin confiarse porque cada reto tiene su riesgo. Esta semana, el jurado daba una segunda oportunidad a uno de los expulsados, pero el resto de los concursantes que continúan luchando por el maniquí de oro tendrían que superarse con un clásico. El diseñador Roberto Diz visitaba el taller y les animaba a apostarlo todo al negro confeccionando un vestido de ese color actual y de tendencia que tuviera un diseño impecable y una costura perfecta. Lluis se alzaba con la victoria y Lorenzo Caprile advertía a todos los demás: "Solo él ha entendido la prueba porque los demás sois como una montaña rusa. Al final vais a ver la versión de mí que todavía no he sacado esta temporada".
Noche inesperada en 'Maestros de la costura': expulsan a Nani y Ancor, el favorito
En el reto por equipos, los participantes se desplazaban hasta el Teatro Real de Madrid, donde recibían una lección magistral de costura por parte de una de las diseñadoras de vestuario más importantes del mundo: Sandy Powell. Shakespeare in Love, El aviador, Carol, La Favorita, El Irlandés o Entrevista con el Vampiro son algunas de las películas por las que ha estado nominada a numerosos galardones como los Bafta, además de ganar tres premios Oscar a Mejor Diseño de Vestuario. Como las prendas que se utilizan en el teatro juegan un papel crucial para dar soporte a las voces y permitir a los artistas exprimir todo su potencial, los grupos debían reproducir dos trajes que vestirían mujeres de la alta burguesía del siglo XIX. Lluis, Javier y Laura ganaban por "tener el resultado más perfecto" y enviaban así a Fermín, Gabriel, Yelimar y Mily a la prueba de expulsión.
Además, en ese mismo reto, uno de los aprendices expulsados regresaba al taller. Para la repesca, Mariana Barturen, una de las mejores sombrereras de España, entregaba a cada uno de los participantes una flor que debían integrar en su diseño. El jurado comenzaba felicitando a todos por su trabajo y creatividad y uno a uno analizaban sus diseños, pero finalmente Ancor era el elegido para volver de pleno derecho al concurso. "El trap me llevó a la expulsión y ahora el teatro me ha devuelto al concurso. No quepo en mí de la emoción", expresaba el participante, considerado el favorito de la edición en las redes sociales.
En la eliminación, los mandiles negros se enfrentaban a la moda circular, reciclaje o upcycling. Así, debían confeccionar ropa nueva a partir de algo que ya existe para darle una segunda oportunidad a las prendas y demostar su creatividad reutilizando una de los diseños que elaboraron en el taller en otros programas. Además, contaban con Bibiana Fernández y Anabel Alonso, quienes se probaban el diseño de María Escoté, que se cortaba en directo cosiendo al participar en el reto. Mientras que Mily y Yelimar más o menos entendían la prueba y convencían al jurado, Gabriel y Fermín estaban en la cuerda floja. "Los dos son unos chapuzas", expresaba la diseñadora. "Tu prenda es un auténtico desastre y el error más grave es que no te lo puedes poner", decían a Fermín, que se convertía en el expulsado de la noche. Para sorpresa de todos, Lluis se planteaba irse del concurso por la mala relación que mantiene con Gabriel, pero Raquel Sánchez Silva le pedía por favor que se lo pensara mejor antes de tomar una decisión precipitada. ¿Acabará abandonando?
