El universo de las series para la generación Z: ¿qué las diferencia de la 'millennial'?

Todos aquellos nacidos a partir de 1996, que este año cumplen como máximo 24, son el público objetivo y los protagonistas de estas nuevas ficciones que cambian la narrativa con respecto a las series que habíamos visto en los últimos años

Por Marina Ortiz Cortés

Hace menos de 5 años eran los millenials quienes ocupaban todas nuestras conversaciones y ahora son los jóvenes de la Generación Z, cuya primera hornada cumple 24 años en 2020, los que ocupan los nuevos intereses. La diferencia con lo anterior es que estos nuevos adultos son nativos digitales y, por ejemplo, ocupan redes sociales novedosas y polémicas como Tik Tok, donde abunda el humor, los bailes o la moda. Estos empiezan a llegar ya a las grandes industrias de la cultura pop, donde los adolescentes empiezan a mostrar su modo de vida, que tanto difiere de sus mayores y que poco a poco va convirtiéndose en la norma. Tienen otro vocabulario y su rutina es diferente, también la música empieza a encontrar su lugar con intérpretes como Billie Eilish, Noah Cyrus o Olivia O' Brien. En el mundo audiovisual tienen su huequito, donde comienzan a marcar territorio con nuevas formas de contar historias. En España, ficciones como Élite, Skam o el próximo y esperado estreno de RTVE HIT prometen hablar de los adolescentes de esta época tan convulsa.

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El primer gran ejemplo es Skam, serie noruega que consiguió ganarse al público con su naturalidad a la hora de hablar de los más jóvenes, aquellos que están actualmente en el instituto y que siempre han vivido en un mundo en el que había smartphones e internet. Su acceso a la información puede ser inmediato a través de los gadgets que tienen a su disposición, viven en un mundo globalizado donde no parece haber fronteras (o no las había, antes de la pandemia) pero eso no les impide tener dilemas y problemas con los que cualquiera se sentiría identificado. En ese sentido, poco diferencia a esta ficción -que también se adaptó en España con el mismo nombre y que ya lleva cuatro temporadas- con otras similares de generaciones anteriores como Skins o Dawson Crece.

Ahora HIT nos promete dar una visión completamente nueva y cruda de los adolescentes de hoy en día. Su lado menos romántico y más problemático, las causas por las que deberíamos prestar más atención a esta etapa de la vida por la que antes pasábamos "de puntillas", tal y como nos dice Joaquim Oristerell, showrunner de Ganga Producciones, al cargo de esta nueva ficción de RTVE.

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"Era un época de la vida en que uno se sentía a medio hacer (espinillas, cuerpos sin gracia, pelos asomando desordenadamente por todas partes...) hasta que empujados por los 60, 70 y 80, la dolescencia fue ganando influencia y poder a partir de los 90. La aparición de internet, la eclosión de los smartphones, los códigos Instagram, Tik Tok, los realities de TV, el consumo y el dinero qu todo eso produce. Marca el abismo entre hoy y hace 20 años. No hay mejor documentación que convivir con adolescentes, sobre todo para una serie como HIT, con los que cada día tienen que enfrentarse a ellos desde la complicada situación de sus oficios de profesores", comenta Joaquim Oristerell.

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Hablamos de que la diferencia principal entre estas producciones es, más que la trama, la manera en la que esta está contada. Lo que tiene de especial Skam y que sentó un precedente a la hora de representar a los más jóvenes es que ahora el horizonte se expande. Ya no solo conoces a tus amigos, hablas con ellos o aprendes cosas de su vida a través del tiempo que pasas junto a ellos. Las redes sociales nos han ayudado a ampliar los límites y, de la misma manera en la que te enteras de qué hace tu amigo mientras no está contigo porque lo publica en su perfil en el momento en el que ocurre, los personajes de la serie también lo hacen. "Ellos marcan las líneas de consumo de los demás. Su manera de hablar, de relacionarse, de vestirse...", insiste el showrunner de HIT.

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En el caso de Skam se explota esta multiplataforma en la que viven los jóvenes y no solo está hecha a partir de los episodios. Estos se completan y cobran más sentido a través de la narración transmedia que se hace en las redes sociales de cada uno de los personajes, que son públicas, e interaccionan entre ellos para darle al espectador una visión de casi 360º. También se publican en la web de Movistar+, que es la cadena que produce y emite esta serie, las conversaciones de whatsapp que tienen las protagonistas.

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En los últimos años hemos ido viendo esta evolución pero siempre ha sido en pantalla. Los mensajes que se mandan los personajes en películas y series aparecían como globos de conversación en medio de la acción, dejando claro la importancia que estos tienen. En otra producción de caracter internacional como Euphoria, protagonizada por la polifacética Zendaya, se incluyen en la trama varias aplicaciones, que dan contexto para escenas que quizás no tendrían sentido sin ellas.