Lucía Rivera desmiente tener mala relación con Cayetano Rivera por cuestiones económicas

La modelo, que está a punto de celebrar su primer año de amor con Marc Márquez, ha aclarado que gracias a su trabajo no necesita nada de nadie

Por Antonio Diéguez

Está "a puntito" de celebrar su primer aniversario con Marc Márquez, pero Lucía Rivera se muestra prudente a la hora de hablar de su relación, tal y como se mostró este jueves en su presentación como imagen de los Centros Único y sus productos de dermocosmética, CUBE. Aun así, la modelo comparte lo mucho que ha influido el piloto en su afición al deporte. En su encuentro con HOLA.com, Lucía no sólo revela su rutina para mantener la figura, sino que confiesa sus complejos y adelanta sus planes para irse a vivir fuera. Además, aprovecha la ocasión para desmentir -otra vez, sí- los rumores que apuntan a una mala relación con el torero Cayetano Rivera, quien la adoptó durante sus años de matrimonio con su madre, la modelo y actriz Blanca Romero.

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- ¿Estás muy concienciada que hay que hacerse tratamientos de belleza para cuidar la piel?
- Sí, sí. Siempre me gustó muchísimo y mi madre me concienció pronto con ello. Siempre me encantó el tema de mascarillas y cremas. Ahora estoy obesionada con el PRX porque te quita las manchas de sol.

- ¿Cuándo empezaste a usar cremas?
- Empecé de muy joven porque empecé a trabajar muy joven. Ya cuando entré en la agencia, me dijeron que tenía que regularme la piel. También en la agencia [de modelos] te ayudan, te asesoran, y eso es muy bueno también. Además, es que mi carrera me obliga a ayudarme. Lo bueno es de ser modelo es que te obliga a estar bien contigo misma, que, a veces, te es difícil. 

- ¿Vas mucho al gimnasio?
- Últimamente, estoy yendo más porque le estoy cogiendo vicio.

- Dice tu madre que es por Marc, tu novio.
- No, no –se ríe–. Bueno, al final, cuando lo ves, te apetece más. Es como: “Ostras, espérate. ¡Esto me gusta!”. Al final, lo haces más.

- Te motiva, ¿no?
- Te influye para bien. Haces más deporte.

- ¿Cuántos días vas al gimnasio?
- Todos los días y una hora cada uno, pero tengo un entrenador tres veces a la semana. Cuando no entreno, también hago sentadillas en casa. Además, voy a ir a yoga para ir estirando y coger bien la postura de la espalda. Los que somos delgados no tenemos fuerza en la espada y es muy importante estirarse y trabajarla.

- ¿Qué valoración haces de tu cuerpo? ¿Te operarías de algo?
- Yo operar… Es que soy una chica extremadamente natural. Mis amigas me dicen: “Te quieres mucho, bonita”. No es que me quiera mucho, es que los defectos son importantes también.

- ¿No tienes complejos?
- Complejos tengo, claro. Pero los complejos también me hacen ser quien soy.

- ¿Qué complejos tienes?
- No tengo pecho, pero soy feliz sin pecho. Mis amigas dicen que tienen dolor de espalda y es algo que yo no tengo –se ríe–.

- ¿Alguna vez te han comentado que te operes?
- En Instagram, muchas veces. Pero no me importa. A lo mejor llega un día y lo decido. Ya sabes cómo es la mente. No puedo decirte que no lo haría, porque a lo mejor lo hago.

- No te quita el sueño, vamos.
- La verdad es que no.

- ¿Y en tu profesión te han aconsejado operarte?
- Por el pecho, no. De hecho, en la moda suele ser mejor no tener pecho, aunque depende también.

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- ¿Cómo se plantea el nuevo curso?
- Con muchos proyectos, pero ya sabes que no te puedo contar.

- Este mes acaparas la portada de ¡HOLA! Prêt-à-Porter. 
- Estoy súper contenta con la portada. Además, trabajando con Naty [Abascal] y con Mario Sierra, que empecé a trabajar con ellos de pequeña. Es un equipo equipado. También con Vicky Marcos. Me cuidaron todos de pequeña y mola muchísimo.

- ¿Qué valoración haces de tu carrera de modelo, que en dos años no has parado de trabajar?
- Estoy muy contenta porque está empezando a ser fructífero. Estoy cosechando ahora lo que he estado sembrando. Es muy difícil, eh, que la moda es corta e intensa.

- ¿Dónde estás instalada ahora?
- En Madrid, pero quiero irme fuera. No sé a dónde.

- ¿A Barcelona?
- Fuera de España, porque Barcelona es el mismo mercado que Madrid.

- ¿Quizá Nueva York?
- Sería guay, pero dame tiempo, dame tiempo. En realidad, soy muy joven y no me doy cuenta de lo joven que soy. Mis compañeras tienen veinticuatro o veinticinco y yo tengo veinte. ¡Me sacan cinco años!

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- También te encuentras en un buen momento sentimental.
- Estoy muy bien, pero ya sabes que no me gusta hablar de esto. Me da una vergüenza…

- Estás a punto de cumplir el año, ¿verdad?
- ¡Si ya lo sabes! –se ríe–. A puntito, a puntito.

- ¿Qué balance haces de este año?
- Es que soy muy joven. Con veinte años nunca sabes lo que te va a pasar. A lo mejor, de repente, te enamoras o te desenamoras, te casas…

- ¿Te has aficionado más a las motos en este tiempo?
- Siempre fui muy poco aficionada al deporte. Me hablan de fútbol y ni me entero. Esto ya me toca… Si me hablan y no me entero, es que lo que me faltaba.

- ¿Cuándo vas a presentar a tu madre a Marc? Porque tú si conoces a tu familia...
- Todo necesita su tiempo. Vamos progresivamente porque nunca sabe lo que va a pasar. Los dos tenemos una carrera que nos exige mucho, mucho tiempo.

- Pero aún, sacáis tiempo, ¿verdad?
- Sí. Tenemos una vida muy parecida. Entonces, es guay porque nos entendemos.

- ¿Y mantenéis la confianza?
- Yo sí –se ríe–.

- ¿Te ves siendo madre o es demasiado pronto?
- ¿Tú me ves a mí? Me queda mucho de la carrera. No, no. Yo espero un poco.

- Por mucho que digas que tienes una buena relación con tu padre, Cayetano Rivera, todos los meses te toca desmentirlo. Precisamente, esta semana aseguran que estáis distanciados por un tema económico.
- Este tema está de moda, eh. Tú que me ves todos los meses en presentaciones de campañas, ¿crees que necesito algo de alguien? Es una tontería. ¿Te crees que trabajo gratis?

- ¿Te molesta es tipo de informaciones?
- La gente, al final, inventa. Antes solía estar en el centro de la noticia y, como ahora estoy muy a mi bola y trabajando mucho en la moda, pues la gente se vuelve loca por sacar algo. Encima, con rabia.

- Parece que estés trabajando por tu apellido o ser “novia de”. 
- Pero es que a todas las mujeres nos pasa. Vivimos en una sociedad muy machista, pero aquí, en Nueva York y Los Ángeles. El otro día salió un youtuber diciendo que Bella Hadid era la “novia de”. Esto pasa siempre. La novia de Cristiano o la novia de no sé quién… Siempre te van a llamar “novia de”.

- ¿Te molesta que te lo digan?
- Sí, claro. Pero eso a todos. Al final, tengo una vida de trabajo, que es la que expongo, y luego mi vida privada. Si llego a casa y lo he contado todo, no me queda nada.

- ¿Qué tal está tu hermano Cayetano?
- Muy guapo. Igual de guapo que Martín. Están de escándalo. 

- ¿Ya habla?
- No te puedo decir mucho. No sé lo que se puede contar y lo que no. Esto va cifrado –se ríe–.

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Lucía Rivera en la Mercedes Benz Fashion Week Show