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03:30
Fácil
Por
¡HOLA! COCINA
La combinación de fresas y nata es un clásico de siempre. Aquí le damos una vuelta de tuerca y las servimos dentro de una concha de hojaldre. Aprovecha la temporada de fresas para hacer este postre que resulta muy fácil de preparar. La base te vale para emplear cualquier otra fruta. Tú eliges.
- 2 láminas de Masa de hojaldre 285 gramos cada una
- 24 ud de Fresas
- 2 cs de Pistachos
Para la mousse
- 250 ml de Nata para montar
- 125 ml de Leche condensada
- 125 ml de Leche entera
- 3 hojas de Gelatina
PARA LA MOUSSE
-
1.
Hidrata las hojas de gelatina en agua fría
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2.
Pon en un cazo a fuego lento la leche junto con la leche condensada.
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3.
Cuando estén bien mezcladas, escurre la gelatina, añádela, mezcla hasta que se disuelva y retira el cazo del fuego.
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4.
Monta la nata y agrégala con una lengua o espátula la mezcla anterior con movimientos suaves y envolventes.
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5.
Pon la mezcla en un recipiente y métela 2 horas en el congelador.
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6.
Transcurrido este tiempo, saca y bate para romper los cristales que se han formado y, de este modo, conseguir que sea más cremosa. Repite la operación dos veces más.
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1.
Precalienta el horno a 180ºC.
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2.
Estira la masa de hojaldre con un rodillo, divide con un cortapastas redondo de diámetro similar al de los moldes donde se vayan a colocar; en este caso, 8 cm.
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3.
Coloca en moldes de flan de borde rizado de modo que sobresalga por la mitad de estos un poco de masa simulando la apariencia de una concha.
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4.
Mételos al horno 15 minutos o hasta que la pasta esté dorada.
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1.
Lava y parte las fresas por la mitad.
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2.
Bate la mousse una vez más, pon 2 cucharadas soperas en cada concha de hojaldre, coloca 3 fresas en cada una y espolvorea con los pistachos picados.
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