Gwyneth Paltrow ha hablado por primera vez en una entrevista de televisión desde el nacimiento de su hija el pasado mayo. La actriz descubrió al público su lado más doméstico y casero para hablar con la reina estadounidense del espectáculo, Oprah Winfrey. Ayudada por Jude Law, con quien comparte cartel en la película Sky Captain And The World Of Tomorrow, Gwyneth, seguidora de la dieta macrobiótica, preparó su plato favorito y anunció que entre sus proyectos está escribir un libro de cocina natural y orgánica. Además, la actriz habló de su maternidad, de su matrimonio y desveló por fin por qué ella y Chris Martín decidieron poner el insólito nombre de Apple (Manzana) a su hija.
"¡Su papá dijo un día, creo que si es una niña su nombre debería ser Apple!", contó Gwyneth, ¡Me pareció tan dulce y evocó una imagen tan encantadora para mí -ya saben, las manzanas son tan dulces, son sanas, y además es algo bíblico- que me pareció estupendo. Solamente pensé ¡perfecto!". "Cuando ella nació-continúa Gwyneth- se convirtió en una especie de atrocidad internacional que la llamásemos así. Pero hay personas que se llaman Rose, Lily, Ivy o June...o tienen otros nombres también muy bonitos".
Fiel seguidora del yoga, en la citada entrevista la actriz reconoció que el "parto natural" que ella había planeado no sucedió tal y como esperaba: "Me gusta el yoga, soy hippie y quería relajarme y respirar a mi manera, después de sesenta y dos horas o algo así, los médicos decían: "Esto es serio, necesita usted que le pongamos la epidural".
La llegada del bebé -que Oprah celebró obsequiando a la actriz con 100 libros infantiles como comienzo de la biblioteca de Apple- ha llevado a la estrella de Hollywood "a una dimensión nueva en emociones que yo nunca había sentido. En un minuto te redefines completamente. Juro, llena de emoción, que es inexplicable. Sentí en un momento como mi vida ha cambiado para siempre".
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