Un bronceado tan falso ¡como perfecto!

Todas las claves para ponerse moreno sin sol

Por hola.com

Consejos Biotherm

No existe forma más sana ni segura de lucir un bonito tono dorado que recurrir al autobronceador. Muchas personas sienten cierta reticencia hacia él, pensando que deja un color poco natural, pero éste es un miedo totalmente infundado. Aprovechar al máximo sus ventajas es fácil si se conocen sus secretos.

  • Antes de aplicar autobronceador, conviene realizar una limpieza a fondo y una exfoliación, lo que contribuye a conseguir un resultado más uniforme.
  • Es importante prestar especial atención a las zonas más rugosas del cuerpo, como codos, rodillas o tobillos.
  • El autobronceador se extiende primero en la palma de la mano, y después se distribuye de forma regular con gestos circulares, siempre de arriba hacia abajo. Es importantísimo conseguir una aplicación uniforme.
  • Una vez aplicado el autobronceador, elimine un poco de producto de tobillos, rodillas y codos, donde el color queda más intenso y poco natural.
  • Cuando extienda el producto en el rostro, debe retirar el exceso de la raíz del pelo y de las cejas, y llevarlo de la mandíbula hacia el escote para no dejar una línea de demarcación en el cuello. No olvide repartirlo también tras las orejas.
  • Es importantísimo y vital lavarse las manos con agua y mucho jabón para eliminar el producto de las palmas si no quiere acabar con ellas de color naranja.
  • Hay que dejar pasar al menos media hora antes de vestirse, incluso en las fórmulas de secado rápido.
  • No se debe aplicar autobronceador poco antes de irse a la cama, ya que las sábanas podrían quedar manchadas.
  • Es importante recordar que el falso bronceado no es visible hasta al menos dos horas tras la aplicación del producto. Si pasado este tiempo se busca un tono más intenso, se puede repetir la aplicación.
  • Si se obtiene un mal resultado, se puede acelerar la desaparición del color mediante una exfoliación. Para un resultado impecable, conviene reaplicar el autobronceador cada tres o cuatro días.
  • Cuando la piel es clara, debe usarse un autobronceador de intensidad media. Los más oscuros favorecen más a los cutis más oliváceos.
  • Los autobronceadores pueden tener un cierto efecto deshidratante y secar la piel, por lo que no está de más compensarlo mediante una mascarilla nutritiva para el rostro o una crema muy untuosa para el cuerpo.