Victoria: 'Esta es mi historia'
"Rompí con todos mis amigos"
"En aquel momento, no sabía cuáles eran mis verdaderos amigos. A quién podía escuchar en realidad. Había personas a mi alrededor que creía que lo eran, pero que, como se demostraría más tarde, no tenían la misma definición de amistad que yo. Me sentó mal y me dolió. Especialmente cuando algunos acudieron a los medios de comunicación y contaron mentiras -también algunas verdades- sobre mí. Fue un periodo agitado, así que decidí viajar a Francia y rompí el contacto con todos ellos. Con algunos retomé la amistad.
"No obstante, con varios de ellos reanudé mi relación -entiendo que les haya podido decepcionar y que no entiendan que pudiera dudar de su amistad-, pero atravesaba una mala racha en la que me sentía bastante insegura y me vi forzada a hacerlo... Espero que puedan perdonarme. Mi estancia en Francia tampoco fue fácil pero, al menos, me permitió apartarme de todo aquel jaleo".
"Los desengaños que he sufrido me han hecho ser mucho más cuidadosa. Ahora escojo las personas a las que me quiero dar. Hay un tipo de personas que se jactan de conocerme y ser mis amigos (risa fuerte).¡Pero a mí no me engañan! En otras palabras: ahora sé quienes son mis verdaderos amigos, los que tienen la misma definición de amistad que yo".
"Puedo vencer cualquier obstáculo"
"En Estados Unidos aprendí que realmente podía superar cualquier escollo. Por primera vez, me di cuenta de que podía cumplir con mi papel de Princesa heredera sin necesidad de reprimir mi otro yo. Y sucesivamente desapareció el miedo a no hacerlo bien. He aprendido a conocerme a mí misma, escucho mis propias señales y puedo lograr mi propio bienestar. Siento una enorme fuerza que antes no conocía".
"Soy muy consciente de lo mal que lo pasé. Y hoy estoy agradecida porque todo ocurriera como ocurrió. Gracias a la familia, a los amigos y a la ayuda profesional, que recibí en Estados Unidos, he aprendido tanto sobre los otros, la vida y especialmente sobre mí misma. Ahora ya he pasado la experiencia y sé que puedo ser Princesa sin tener que renunciar a ser yo misma. Aquello que sucedió me resultó difícil afrontarlo, pero debía hacerlo. Ahora me encuentro bien y con el bagaje que he adquirido con todo esto espero poder ayudar a algún otro".
Lo último de:
sueca
Recomendamos
Últimas Noticias
Ana Boyer comparte la primera foto con su hijo Martín seis días después del nacimiento
Carlos III cuenta por primera vez cómo se sintió cuando le comunicaron su diagnóstico
Recordamos los 15 mejores looks de Ana de Armas por su 36 cumpleaños
14 tesoros que van a enamorarte si te gusta la cosmética de lujo
Las 10 recetas más vistas de abril en ¡HOLA! Cocina
La historia de Cristina, la novia que se casó en Córdoba con un vestido diseñado por su suegra y mantilla
Recomendamos
"En aquel momento, no sabía cuáles eran mis verdaderos amigos. A quién podía escuchar en realidad. Había personas a mi alrededor que creía que lo eran, pero que, como se demostraría más tarde, no tenían la misma definición de amistad que yo. Me sentó mal y me dolió. Especialmente cuando algunos acudieron a los medios de comunicación y contaron mentiras -también algunas verdades- sobre mí. Fue un periodo agitado, así que decidí viajar a Francia y rompí el contacto con todos ellos. Con algunos retomé la amistad.
"No obstante, con varios de ellos reanudé mi relación -entiendo que les haya podido decepcionar y que no entiendan que pudiera dudar de su amistad-, pero atravesaba una mala racha en la que me sentía bastante insegura y me vi forzada a hacerlo... Espero que puedan perdonarme. Mi estancia en Francia tampoco fue fácil pero, al menos, me permitió apartarme de todo aquel jaleo".
"Los desengaños que he sufrido me han hecho ser mucho más cuidadosa. Ahora escojo las personas a las que me quiero dar. Hay un tipo de personas que se jactan de conocerme y ser mis amigos (risa fuerte).¡Pero a mí no me engañan! En otras palabras: ahora sé quienes son mis verdaderos amigos, los que tienen la misma definición de amistad que yo".
"Puedo vencer cualquier obstáculo"
"En Estados Unidos aprendí que realmente podía superar cualquier escollo. Por primera vez, me di cuenta de que podía cumplir con mi papel de Princesa heredera sin necesidad de reprimir mi otro yo. Y sucesivamente desapareció el miedo a no hacerlo bien. He aprendido a conocerme a mí misma, escucho mis propias señales y puedo lograr mi propio bienestar. Siento una enorme fuerza que antes no conocía".
"Soy muy consciente de lo mal que lo pasé. Y hoy estoy agradecida porque todo ocurriera como ocurrió. Gracias a la familia, a los amigos y a la ayuda profesional, que recibí en Estados Unidos, he aprendido tanto sobre los otros, la vida y especialmente sobre mí misma. Ahora ya he pasado la experiencia y sé que puedo ser Princesa sin tener que renunciar a ser yo misma. Aquello que sucedió me resultó difícil afrontarlo, pero debía hacerlo. Ahora me encuentro bien y con el bagaje que he adquirido con todo esto espero poder ayudar a algún otro".