Carta de Raniero veinte años después
El escrito se publicó en una revisra de Historia, 'Anales mnegascos'
"Fue una mujer perfecta, completa, uno de esos seres especiales que con su sola presencia suscitaba la admiración y el respeto de todos. Como cada ser humano ella era débil, pero lo compensaba con una gran fuerza de voluntad". Con estas palabras, Raniero de Mónaco ha rendido tributo personal a la que fue su esposa, Grace Kelly, cuando se cumple el 20º aniversario de su fallecimiento.
El Soberano monegasco, de 80 años, ha aprovechado tan triste fecha para escribir una carta, (también un perfil de la Princesa, acompañado de numerosas fotografías) que será publicada en la revista de Historia "Anales monegascos", en la que, con tristeza y melancolía, se dirige a la que fue su esposa durante 26 años.
"Este número de los Anales Monegascos recordará cada momento que ella, de manera admirable, ha estado a mi lado como princesa de Mónaco, atendiendo perfectamente, al mismo tiempo, sus deberes de esposa y madre"
"Veinte años después de su desaparición, la Princesa está todavía presente en nuestros corazones y en nuestra memoria... Como todos afrontó conflictos, desplantes, sufrimientos físicos y morales. Sin embargo, lo hizo con una gran entereza y sin compadecerse de sí misma durante toda su vida, que fue plena y apasionante".
"Estas fotografías, añade Rainiero, nos muestran con qué amor y con que inteligencia ella se fue entregando a través de su empeño en el campo artístico, cultural y social a sus conciudadanos; particularmente, a través de su atención a los niños, a los discapacitados y a los ancianos".
A pesar de los 20 años que han transcurrido desde que Gracia nos dijo adiós, su recuerdo y admiración pervive en el corazón de todos. Sobre todo en el de los monegascos, que vieron como su pequeño país alcanzó un gran protagonismo internacional, convirtiéndose en el centro del glamour y el lujo, gracias a la boda del Príncipe monegasco con la estrella de Hollywood.
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"Este número de los Anales Monegascos recordará cada momento que ella, de manera admirable, ha estado a mi lado como princesa de Mónaco, atendiendo perfectamente, al mismo tiempo, sus deberes de esposa y madre"
"Veinte años después de su desaparición, la Princesa está todavía presente en nuestros corazones y en nuestra memoria... Como todos afrontó conflictos, desplantes, sufrimientos físicos y morales. Sin embargo, lo hizo con una gran entereza y sin compadecerse de sí misma durante toda su vida, que fue plena y apasionante".
"Estas fotografías, añade Rainiero, nos muestran con qué amor y con que inteligencia ella se fue entregando a través de su empeño en el campo artístico, cultural y social a sus conciudadanos; particularmente, a través de su atención a los niños, a los discapacitados y a los ancianos".
A pesar de los 20 años que han transcurrido desde que Gracia nos dijo adiós, su recuerdo y admiración pervive en el corazón de todos. Sobre todo en el de los monegascos, que vieron como su pequeño país alcanzó un gran protagonismo internacional, convirtiéndose en el centro del glamour y el lujo, gracias a la boda del Príncipe monegasco con la estrella de Hollywood.