La Reina de Dinamarca regresa a Bélgica 25 años después de su última visita
La reina Margarita y su esposo, el príncipe Enrique, iniciaron ayer su visita oficial a Bélgica, la primera desde 1976, fecha en la que fueron invitados por los entonces reyes Balduino y Fabiola. Más de 25 años después, la soberana danesa ha regresado al país belga para para fomentar las buenas e históricas relaciones entre las dos monarquías.
Fueron recibidos por el príncipe Felipe y la princesa [Matilde de Bélgica], en un ventoso día de Bruselas en el que los sombreros de ala ancha de las damas dificultaron los saludos. A continuación, se dirigieron en cortejo, junto a 136 imponentes guardias a caballo, al palacio real, donde les esperaban el rey Alberto y la reina Paola, acompañados por la guardia de honor y una multitud tan entusiasta como hospitalaria. A su llegada, besos al aire y cálidos apretones de manos se sucedieron entre los huéspedes y sus anfitriones.
Con esta visita, la Reina danesa y su marido corresponden a la que hicieran, hace siete años, los soberanos belgas a Dinamarca. Y, en esta ocasión, igualmente que en la anterior, los monarcas se hicieron entrega de sus regalos: 12 platos dorados con motivos florales, para la reina Margarita y el príncipe Enrique, y una televisión Bang & Olufsen y una pintura de la soberana danesa, con motivos basados en el cielo y el mar, para los Reyes de los Belgas.
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Con esta visita, la Reina danesa y su marido corresponden a la que hicieran, hace siete años, los soberanos belgas a Dinamarca. Y, en esta ocasión, igualmente que en la anterior, los monarcas se hicieron entrega de sus regalos: 12 platos dorados con motivos florales, para la reina Margarita y el príncipe Enrique, y una televisión Bang & Olufsen y una pintura de la soberana danesa, con motivos basados en el cielo y el mar, para los Reyes de los Belgas.