Ingrid, Elisabeth y Amalia: las futuras Reinas de Europa

por hola.com
Los círculos reales han experimentado cierto boom de natalidad durante los últimos años, con una consecuencia que hará historia: el correspondiente boom de futuras reinas por nacimiento. Como mínimo tres países europeos (Noruega, Bélgica y Holanda) han dado la bienvenida a primogénitas desde 2001 y puede que la pequeña princesa Aiko de Japón llegue a convertirse en la nueva emperatriz del Trono del Crisantemo.

La princesa Ingrid Alexandra de Noruega, nacida en enero, e hija del heredero de la Corona, el [príncipe Haakon] y la [princesa Mette-Marit], es la más joven entre las futuras Reinas de Europa, y goza de un estatus especial como la primera heredera al trono de la historia de Noruega. Su orgulloso padre, Haakon, no pudo contener su satisfacción por la llegada de su pequeña Ingrid, llamándola "la niña más hermosa del mundo" y describiendo su nacimiento como "una experiencia conmovedora y maravillosa".

En Holanda, hombres y mujeres gozan de los mismos derechos de ascensión, de modo que cuando el príncipe heredero Guillermo Alejandro y su esposa la [princesa Máxima] presentaron a su primogénita en 2003, el público holandés estaba conociendo también a la niñita que un día ha de ser su reina. \"Aunque nacen muchos niños cada día", decía Guillermo sobre la princesa Catharina-Amalia, "a nosotros nos parece que ésta es la más bonita del mundo".

Una reciente ley belga garantiza derechos hereditarios equitativos para ambos sexos, lo cual significa que la princesa Elisabeth, hija del príncipe heredero Felipe y su esposa, la [princesa Matilde], está destinada a convertirse en la primera Reina que suba al trono en la historia moderna de Bélgica. "Espero que mi hija sea una gran Reina", dijo Felipe. "Pero, ante todo, una gran mujer".

Bastante más controvertido fue el nacimiento en 2001 de la princesa Aiko, la única hija del príncipe heredero Naruhito y su esposa, la princesa Masako, que abrió un debate en Japón sobre la ley de sucesión del país, limitada a los hombres. La pareja pasó ocho años intentando engendrar un bebé (y sufrió un aborto) antes de la llegada de Aiko, dando pie a comentarios de que Naruhito intentaría modificar la constitución para que su hija se convirtiera en la primera emperatriz del país en 250 años. Fuentes de la Casa Imperial, estricta y de dominio masculino, han expresado su preocupación por dicha modificación. Sin embargo, el hecho de que la princesa heredera, de 40 años, esté sufriendo trastornos de ansiedad, en parte debido a la presión de engendrar un heredero varón, ha devuelto el asunto a la primera plana.