Francisco José Rivera Pantoja tenía sólo tres meses la primera vez que estuvo en Cantora, la querida finca que su padre, Francisco Rivera, Paquirri había comprado con tanta ilusión en la provincia de Cádiz. Hasta entonces el pequeño no había salido del domicilio sevillano de sus padres, Francisco Rivera e Isabel Pantoja. La primera visita del pequeño fue todo un ritual. Su orgulloso padre le llevó a la pequeña plaza de toros de la finca, donde dos meses después se celebraría su multitudinario bautizo.
El niño llegó al mundo nueve meses y diez días más tarde de la celebración de la boda de Paquirri e Isabel Pantoja. La cantante abandonó sus galas para estar más cerca del niño del que aseguraba: "El papel de madre hace que me sienta orgullosa de mi misma". Era su primer hijo y el tercero de su marido que tenía a Francisco y Cayetano de su matrimonio con Carmen Ordóñez.
Hoy, 19 años después, Francisco José Rivera acude, como era el deseo de su padre, asiduamente a Cantora. El joven continúa sus estudios mientras sigue con mucho interés los nuevos negocios de hostelería de su madre. Está muy unido a sus hermanos, a los dos mayores y a Isabelita, la niña peruana que Isabel Pantoja adoptó y a la que él protege con mucho cariño.
