El rey de la hipocondría, las gafas de pasta más famosas del mundo, el cineasta, el hombre cuya sola presencia es todo un evento cambió anoche las cámaras por el clarinete para ofrecer su primer concierto en España junto a su banda de jazz. Allen puso sus dedos sobre su clarinete poco después de dar las nueve de la noche para ofrecer un concierto memorable. Los 700 afortunados espectadores dieron fe de ello a la salida y ovacionaron al cineasta nada más aparecer en el escenario.
Allen convenció y congenió con un público entregado, a pesar de la parquedad de su saludo: Estoy encantado de estar aquí con ustedes, tocando unos temas musicales que estuvieron de moda en Estados Unidos hace muchos años. Intentaremos hacerlo lo mejor que sabemos.
El genial director tiene previsto actuar hoy en la Kursaal de San Sebastián y mañana en Barcelona, donde recibirá la Medalla de Oro de la Ciudad Condal de manos del alcalde de la ciudad, Joan Clos.
