Numerosos rostros del mundo del cine se reunieron para festejar la entrega de los Premios Goya, que, en esta ocasión, celebraban su 17ª edición. La entrada al Palacio de Congresos de Madrid, lugar elegido para la entrega de estos galardones cinematográficos, se convirtió en una inspirada pasarela de moda donde actores y actrices derrocharon glamour y elegancia, en una noche en la que destacaron las mujeres con vestidos largos y los hombres con esmoquin.
Destacó la presencia de Penélope Cruz, que estaba radiante a su llegada con un abrigo y un vestido corto de Chanel. Posteriormente, la bellísima madrileña deslumbró con un diseño de Alta Costura, de esta misma casa francesa de moda, que eligió para entregar -junto al director Alejandro Amenábar- el Goya a la Mejor Película. Igualmente, Mónica Cruz y Geraldine Chaplin, que llevó un elegante traje pantalón, eligieron esta firma para mostrarse en esta noche del cine español.
Por su parte, la joven Leonor Watling se decantó por un espectacular vestido de Valentino. No obstante, una de las firmas preferidas por muchas de las asistentes fue Christian Dior. Y es que sus diseños fueron lucidos, entre otras, por Natalia Verbeke, Maria Esteve y Lolita.
Igual de elegantes y maravillosas aparecieron Assumpta Serna, Ana Fernández y Mónica Randall, las tres con diseños de Jesús del Pozo; Goya Toledo, con un vestido de Oscar de la Renta; Mercedes Sampietro, con una blusa y pantalón de Carolina Herrera; Tina Sainz, con una creación de Roberto Torretta, y Marisa Paredes, con un traje de Sybilla en color verde esmeralda, escote cruzado y de estilo oriental. Una de las invitadas más sexy fue Paz Vega, que llevó un vestido rojo de Hannibal Laguna que dejaba al descubierto su espalda.
Entre los hombres, José Coronado fue uno de los más elegantes con un traje negro de Giorgio Armani a juego con la camisa. El mismo calificativo se podría aplicar a Manuel Alexandre que estaba muy elegante con esmoquin y pajarita. Pero, sin duda, los más originales fueron los presentadores de la ceremonia, Guillermo Toledo y Alberto San Juan. Ambos llevaban frac, pero el primero lo combinaba con una camisa violeta de chorreras y el segundo, con una camiseta de rayas blancas y azules. El toque cómico lo puso Santiago Segura cuando apareció en el escenario vestido de mariachi. El genial actor fue el encargado de entregar el Goya al Mejor Actor Revelación.
También estuvo Paulina Rubio que acudió acompañada por Ricardo Bofill. La cantante mexicana se encontraba radiante con una creación de John Galliano.
