¿Qué cuidados requiere la piel antes de una exposición solar?
Exfoliación e hidratación, claves para un bronceado más bonito y duradero
Muchas son las personas que, durante los meses de primavera y verano, sueñan con lucir un bronceado envidiable. Sobre todo, porque es en esta época cuando las prendas se hacen más ligeras y la piel deja de estar permanentemente protegida bajo la gruesa ropa invernal. No obstante, hay quienes olvidan que para conseguir ese tono moreno tan bonito y atractivo el proceso debe empezar varios días (incluso semanas) antes de la exposición solar. ¿Cómo? Preparando la piel a través de dos pasos muy sencillos:
Limpieza y exfoliación:
Es absolutamente imprescindible para que la piel esté preparada para broncearse. Y es que sólo habiéndonos librado de las células muertas y de las impurezas se conseguirá que el tono que vayamos a adquirir sea uniforme, evitando así los ronchones. En realidad se debería hacer durante todo el año con una frecuencia aproximada de dos veces por mes (menos, si la piel es grasa), pero si tan sólo quiere realizar la exfoliación antes de tomar el sol, no lo haga en las horas previas, pues eliminaría parte de las defensas de la piel ante las radiaciones solares.
Hidratación:
Si en invierno es necesaria, en los meses de buen tiempo resulta fundamental debido a los rigores externos (sol, aire acondicionado...) que hacen que la piel se reseque. Por eso, de cara al verano es importante prepararla y conseguir que quede tersa y luminosa. Sólo así el bronceado posterior será más bonito y duradero. No obstante, hay que tener en cuenta que no se deben utilizar cremas demasiado untuosas. Para combatir el calor y el sudor es mejor optar por hidratantes ligeras y refrescantes, tanto de día como de noche.
Recomendamos
Últimas Noticias
De María Pombo a Laura Escanes: cumbre de ‘influencers’ en el partido de Carlos Alcaraz en el Mutua Madrid Open
Carlos III cuenta por primera vez cómo se sintió cuando le comunicaron su diagnóstico
Recordamos los 15 mejores looks de Ana de Armas por su 36 cumpleaños
14 tesoros que van a enamorarte si te gusta la cosmética de lujo
Las 10 recetas más vistas de abril en ¡HOLA! Cocina
La historia de Cristina, la novia que se casó en Córdoba con un vestido diseñado por su suegra y mantilla
Recomendamos
Limpieza y exfoliación:
Es absolutamente imprescindible para que la piel esté preparada para broncearse. Y es que sólo habiéndonos librado de las células muertas y de las impurezas se conseguirá que el tono que vayamos a adquirir sea uniforme, evitando así los ronchones. En realidad se debería hacer durante todo el año con una frecuencia aproximada de dos veces por mes (menos, si la piel es grasa), pero si tan sólo quiere realizar la exfoliación antes de tomar el sol, no lo haga en las horas previas, pues eliminaría parte de las defensas de la piel ante las radiaciones solares.
Hidratación:
Si en invierno es necesaria, en los meses de buen tiempo resulta fundamental debido a los rigores externos (sol, aire acondicionado...) que hacen que la piel se reseque. Por eso, de cara al verano es importante prepararla y conseguir que quede tersa y luminosa. Sólo así el bronceado posterior será más bonito y duradero. No obstante, hay que tener en cuenta que no se deben utilizar cremas demasiado untuosas. Para combatir el calor y el sudor es mejor optar por hidratantes ligeras y refrescantes, tanto de día como de noche.