La patata asada es una de las mejores guarniciones para servir con todo tipo de platos: carnes, pescados, mariscos... Hay muchísimas elaboraciones distintas para prepararlas, pero queremos mostrarte una de las más sencillas. Tan sólo necesitamos, además de las patatas, ajo, perejil, aceite y sal. ¡Empieza precalentando el horno!
- 4 ud de Patata grandes
- 2 dientes de Ajo
- 50 ml de Vino blanco
- Perejil fresco
- Aceite de oliva virgen
- Sal
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1.
Precalentamos el horno a 180ºC.
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2.
Lavamos, secamos bien las patatas y las cortamos en gajos con la piel.
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3.
En un mortero machacamos los ajos pelados, el perejil fresco, el aceite y sal hasta formar una pasta.
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4.
Colocamos los gajos de patata en una bandeja de horno y nos ayudamos con una brocha para pintarlas bien con la mezcla.
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5.
Agregamos el vino blanco repartiéndolo por todas las patatas.
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6.
Las horneamos, primero 20 minutos a 160ºC y después subimos la temperatura a 180ºC para hornearlas 10 minutos más.
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7.
Sacamos del horno con cuidado de no quemarnos y servimos.
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