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Fácil
¿Cómo conseguir que el pollo al horno esté jugoso por dentro y con la piel crujiente por fuera? A pesar de que la receta del pollo al horno es sencilla de preparar, existe una serie de trucos para que el pollo nos quede de diez, crocante y nada seco a la vez. Puedes untarlo de mantequilla, de aceite o incluso agua para que no se seque demasiado dentro del horno que previamente debe estar precalentado para que nos quede el interior jugoso y la piel crujiente y evitar que se reblandezca. Luego sigue las pautas de horneado que te recomendamos en esta receta y para terminar, déjalo reposar un poco. Para que se asienten los jugos, saca el pollo del horno y déjalo reposar unos 10 minutos antes de trincharlo. Notarás la diferencia si no lo haces.
- 1 Pollo
- Mantequilla sin sal
- Mezcla de hierbas aromáticas albahaca, tomillo, romero...
- Sal
- Pimienta negra
- Aceite de oliva
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1.
Precalienta el horno a 180ºC con una cazuela en el interior apta para horno, si tienes una de hierro fundido mucho mejor.
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2.
Salpimenta el pollo al gusto y úntalo con la mantequilla y las hierbas aromáticas. Nosotros hemos utilizado tomillo pero puedes utilizar la hierba que más te guste. Es preferible utilizar hierbas aromáticas frescas pero si no tienes a mano, no te preocupes, puedes utilizar hierbas secas.
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3.
Cuando el horno alcance la temperatura deseada, saca la cazuela -con cuidado de no quemarte- y deposita el pollo en su interior apoyado sobre un costado (un ala o el muslo). Si la cazuela está caliente, se sellará la piel y quedará crujiente.
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4.
En esa postura, hornea el pollo durante 15 minutos aproximadamente.
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5.
Seguidamente, sácalo y voltéalo, para apoyarlo sobre el costado contrario, y, de nuevo, hornea otros 15 minutos.
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6.
A continuación, coloca el pollo con la pechuga hacia arriba y hornea durante 30 minutos más.
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7.
Por último, pon el pollo con la pechuga hacia abajo y hornea durante 25 minutos.
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8.
Ya lo tienes listo para trinchar y servir. Puedes acompañarlo de la salsa que más te guste, pero el propio pollo habrá soltado unos deliciosos jugos. Unas patatas recién fritas o un cremoso puré de patatas o boniato son el acompañamiento perfecto de este pollo asado al horno con tomillo.
