La tecnología está ya presente en todos los ámbitos de la vida, incluido en el de la salud. Los avances en este campo ofrecen esperanza y vías de actuación que, hasta hace pocos años, eran casi impensables. En lo que a la rehabilitación en niños con algún tipo de trastorno neurológico se refiere, la realidad virtual se presenta como un potente aliado. En primer lugar, porque “los entornos virtuales pueden ayudar a distraer a los niños y a las niñas, reducir la percepción del dolor y promover la relajación”, nos indica Mayche Ayllon Muñoz, presidenta de la Fundación Llamada Solidaria, una organización sin ánimo de lucro centrada en apoyar la investigación para luchar contra las enfermedades poco frecuentes y en procurar el bienestar de los afectados y de sus familias.

 

Ya solo con el hecho de reducir el dolor y de ayudarles a relajarse, son efectos de vital importancia en el día a día de muchos niños con un trastorno neurológico, independientemente del origen de este; además, la realidad virtual se puede aplicar en diferentes terapias orientadas a buscar mejoras a nivel motor y cerebral, entre otras. Por ello, con motivo del Día Mundial de las Enfermedades Raras, este jueves 29 de febrero, Llamada Solidaria se ha unido a Zero Latency, empresa de realidad virtual, para que los niños que forman parte de la fundación puedan probar los beneficios de esta actividad para ellos.

La realidad virtual en terapias para niños con trastornos neurológicos

María Consuelo Ayllon Muñoz recalca que, en cuanto a las necesidades específicas de los niños de la Fundación (con enfermedades raras, muchas de las cuales les producen algún tipo de trastorno neurológico), sería importante realizar una evaluación individualizada para determinar los beneficios potenciales y las áreas de intervención con realidad virtual en cada uno de ellos. “Algunas posibles aplicaciones podrían incluir programas de rehabilitación personalizados, terapia de estimulación sensorial, entrenamiento en habilidades sociales y emocionales, y actividades recreativas para promover el bienestar emocional y la calidad de vida de los niños y las niñas”. De manera detalla, la intervención se puede planificar así:

• Terapia de rehabilitación: esta tecnología “ofrece entornos virtuales que permiten practicar movimientos específicos de manera repetida y controlada”, por lo que se puede utilizar en programas de rehabilitación para mejorar la movilidad, coordinación y fuerza muscular en niños con trastornos neurológicos.
• Terapia de estimulación cognitiva: puede ofrecer desafíos cognitivos, como control de equilibrio, que ayuden a mantener la función cerebral y la agudeza mental, lo que puede ser especialmente beneficioso para menores con enfermedades raras que afectan el sistema nervioso o cognitivo. “Se puede ofrecer actividades y juegos diseñados para estimular funciones cognitivas como la atención, memoria, resolución de problemas y toma de decisiones, lo que puede ser beneficioso para niños y niñas con trastornos neurológicos que presentan dificultades en estas áreas”.
• Terapia de estimulación sensorial: “puede ayudar a regular las respuestas sensoriales en niños con trastornos sensoriales como el autismo, contribuyendo a una mejor integración sensorial y reduciendo las respuestas de hiper o hiposensibilidad.
• Terapia de exposición: “podemos utilizarla como una herramienta para ayudar a los niños y a las niñas a enfrentar y superar sus miedos y fobias de manera gradual y controlada, lo que puede contribuir a reducir la ansiedad y el estrés asociados con ciertas situaciones o estímulos”. La presidenta de la Fundación Llamada Solidaria pone como ejemplo la creación de entornos virtuales que representen situaciones que causan ansiedad en los niños, permitiéndoles practicar estrategias de afrontamiento en un entorno seguro.
• Terapia para mejorar habilidades sociales: “Podemos simular situaciones sociales y ofrecer oportunidades para practicar habilidades sociales y de comunicación de una manera segura y controlada”, explica. “Esto puede ser especialmente beneficioso para niños con trastornos del espectro autista u otros trastornos del desarrollo”.

Beneficios de las terapias de realidad virtual en niños con trastornos neurológicos

Además de la mejora en las habilidades trabajadas en terapia, la práctica en entornos virtuales puede ayudar a los niños a ser capaces de trasladar al mundo esas habilidades aprendidas, “lo que puede facilitar su aplicación en diferentes contextos y actividades diarias”. Esto irá de la mano con un aumento de la confianza en sí mismos, como detalla Ayllón: “a medida que los niños experimentan éxito y progreso durante la terapia con realidad virtual, pueden desarrollar una mayor confianza en sus habilidades y una mayor autoestima, lo que puede motivarlos a seguir participando y esforzándose”.