En lo alto de una colina y entre el mar y la montaña, esta localidad alicantina regala una de las imágenes más simbólicas de la Costa Blanca. De sus playas y calas podemos disfrutar por el día, de su lado marinero, cada tarde al caer al sol en su puerto y en su lonja, cuando las barcas vuelven de faenar y se subasta el pescado, y del encantador casco antiguo de callejuelas empinadas a cualquier hora y desde todas las perspectivas.
13/08/2020 12:30 UTC Por ¡HOLA!