Estamos acostumbrados a comer la coliflor cocida o al horno con bechamel, pero esta hortaliza, de la familia de las coles, se puede cocinar de muchísimas maneras más. ¿Por qué no rebozada y frita? ¿Por qué no como parte de una ensalada, como en este caso, con cebolleta y pipas de calabaza? Dicho y hecho, ¡manos a la obra!
Para ti que te gusta
Este contenido es exclusivo para la comunidad de lectores de ¡HOLA!
Para disfrutar de 5 contenidos gratis cada mes debes navegar registrado.
Este contenido es solo para suscriptores.
Suscríbete ahora para seguir leyendo.Este contenido es solo para suscriptores.
Suscríbete ahora para seguir leyendo.TIENES ACCESO A 5 CONTENIDOS DE
Recuerda navegar siempre con tu sesión iniciada.