Bebé prematuro con su madre©AdobeStock

Día del Niño Prematuro

‘Separación cero’, una llave de oro para la supervivencia de los bebés prematuros

Cada año, unos 13 millones de bebés nacen en el mundo de forma prematura, según la Organización Mundial de la Salud (OMS). Cada 17 de noviembre se celebra el Día del Niño Prematuro, para poner sobre la mesa los retos a los que se enfrentan.

En España, alrededor del 7% de los recién nacidos es prematuro, en una cifra que puede rondar los 30.000 bebés cada año. La supervivencia, el desarrollo y los problemas asociados a la prematuridad plantean muchos desafíos.

Con motivo del Día Mundial del Niño Prematuro, el Instituto Europeo de Salud Mental Perinatal (IESMP) ha iniciado una campaña divulgativa para destacar la importancia especial que cobra la ‘Separación Cero’ en estos bebés.

¿Qué es la ‘Separación cero’?

La ‘Separación cero’ conlleva eliminar o minimizar cualquier separación innecesaria entre madre (u otros familiares si ella no pudiera hacerse cargo) e hijo inmediatamente después del nacimiento y durante el mayor tiempo posible. Se trata de un concepto acuñado por el pediatra Nils Bergman, especializado en salud materno-infantil y en el cuidado de los recién nacidos y los bebés prematuros.

Si para todos los recién nacidos ese contacto precoz con la madre es esencial, para el prematuro puede ser vital, ya que incrementa sus posibilidades de supervivencia. Así lo explica la Dra. Carmela Baeza, médico, consultora internacional certificada en lactancia materna IBCLC y coordinadora de Formación en Lactancia y Salud Mental del IESMP, que recalca cómo en las incubadoras, el riesgo vital para el niño es más alto que cuando está piel con piel con su madre: “En las incubadoras mueren más bebés y pueden tener más dificultades emocionales. Suena duro decirlo, pero la ‘Separación cero’ salva vidas, por eso tenemos que cambiar el lugar en el que se realizan los cuidados, no los cuidados”.

Madre abrazando a su bebé prematuro piel con piel©AdobeStock

Las ventajas de la ‘Separación cero’

Cuando esa asistencia médica se presta al bebé prematuro en contacto directo con su madre; esto es, cuando hay ‘Separación cero’, las ventajas son incontestables, ya que el bebé regula mejor su temperatura, estabiliza su frecuencia cardiaca y su respiración, además de fomentarse la lactancia materna y fortalecerse el vínculo afectivo.

Todos estos beneficios han sido constratados en estudios científicos como una revisión de 2016 que encontró una reducción del 40% en la mortalidad entre los bebés con un peso al nacer por debajo de 2.000 gramos que recibieron cuidados con el Método Madre Canguro, en comparación con el cuidado convencional en incubadora.

Si hablamos de los riesgos de la separación precoz madre-hijo, investigaciones de un equipo liderado por Nils Bergman descubrieron cómo los bebés tienen más riesgo de morir y de contraer infecciones, además de desarrollar estrés tóxico, “el cual tiene enormes efectos a lo largo de la vida, tanto a nivel físico como psíquico”, advierten desde el IESMP.

Debido al alto índice de fallecimientos en bebés prematuros (unos 900.000 mueren cada año en el mundo por complicaciones derivadas del parto, antes siquiera de haber podido ser estabilizados en una unidad neonatal), la OMS ha establecido una nueva guía de recomendaciones. Se trata de un documento de 2022 donde entre las pautas para el cuidado del bebé prematuro o de bajo peso al nacer, incluyen el contacto inmediato piel con piel para mejorar la supervivencia de estos bebés.

“La mejor manera de cuidar a los bebés recién nacidos con bajo peso al nacer, incluso en países de ingresos altos, es a través del contacto piel a piel continuo con la madre, en una unidad de atención madre-recién nacido que brinde cuidados y tratamiento médico para ambos”, resaltaba el Dr. Bjorn Westrup, uno de los expertos que participó en la citada Guía de la OMS.


Un cambio en la atención al prematuro

Para instaurar la ‘Separación cero’ entre el bebé prematuro y su madre se necesita un cambio de paradigma en la asistencia a ambos. “Tanto los profesionales sanitarios como las propias familias deben tener la certeza de que el piel con piel inmediato y la separación cero son el estándar para el cuidado de sus prematuros”, subraya la Dra. Carmela Baeza.

Esto implica una formación específica de los profesionales y la apertura de las Unidades de Cuidados Intesivos Neonatales: “Hay que abrir los espacios neonatales a las familias para trabajar juntos, dejando que realmente sea la madre el lugar de los cuidados”, recalca la experta del Instituto Europeo de Salud Mental Perinatal. El futuro se encaminaría a la creación de unidades donde madre y bebé pudieran ser atendidos de manera conjunta.

“Es cierto que hay algunos casos en los que puede no ser posible hacer piel con piel inmediato por la gravedad de la madre o del bebé, pero estos cuidados Madre Canguro deben establecerse en cuanto sea posible. Cuanto más prematuro es el bebé o más enfermo está, mayores son los riesgos de la separación”, recalca la Dra. Baeza.

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