Pareja con problemas de infertilidad con test de embarazo©AdobeStock

Fertilidad

¿Por qué el estrés influye tanto en la calidad espermática?

En un 30% de los casos, las dificultades para lograr el embarazo se deben al factor masculino; esto es, es el hombre el que tiene alguna alteración que lo impide. Entre las causas de esta realidad puede estar la baja calidad espermática, que viene condicionada también por factores externos como el estrés.

Tal como apunta la Organización Mundial de la Salud (OMS), la mitad de los hombres en edad fértil tiene un semen de baja calidad. Esto puede complicar mucho el objetivo del embarazo. En este problema tienen que ver tanto factores internos, habitualmente durante la espermatogénesis, el periodo de formación de los espermatozoides, como distintas causas externas.

Analizamos con ayuda del Dr. Pascual Sánchez, cofundador y director médico de Ginemed, grupo sanitario especializado en medicina reproductiva, las razones por las que el estrés es una de ellas.

Estrés y calidad espermática: una relación difícil

El estrés puede afectar negativamente a la calidad espermática de varias formas, tal como comenta el experto:

  • Diminuyendo la eyaculación. “Algunos estudios han encontrado que los hombres con niveles altos de estrés y ansiedad, tanto a corto como a largo plazo, eyaculan menos. Como resultado, la concentración espermática es menor”.
  • Aumentando los radicales libres. Uno de los efectos del estrés sobre el cuerpo es que incrementa los radicales libres, “lo que a su vez disminuye la capacidad antioxidante del organismo y, por ende, podría producir efectos negativos sobre la fertilidad masculina”.
  • Alterando estructuras espermáticas esenciales. Se produce porque el estrés afectan negativamente a los ácidos grasos polinsaturados de la membrana plasmática, “lo que, además de de reducir la movilidad espermática, altera de forma significativa estructuras espermáticas esenciales, como la membrana y el ADN, disminuyendo la capacidad fertilizando de los espermatozoides”.
Enfermera en laboratorio de reproducción asistida©AdobeStock

¿Qué otros factores externos pueden comprometer la fertilidad masculina?

Además del estrés, hay otros factores externos y, por lo tanto, evitables, que también influyen de una forma determinante en la calidad del semen. Entre ellos estan, tal como cita el especialista de www.ginemed.es, la contaminación ambiental, el consumo de alcohol y drogas y la exposición a tóxicos, como pesticidas o plomo, ya que dañan el ADN de los espermatozoides.

También se pueden citar las dietas altas en grasas saturadas, la obesidad, el sedentarismo y el ejercicio excesivo, ya que en este último caso los radicales libres “pueden producir alteraciones en la calidad del semen, principalmente en la fragmentación del ADN espermático”, advierte el Dr. Sánchez.

Hay que tener en cuenta también que la calidad espermática va decreciendo con el paso de los años, por lo que la edad del hombre es un factor a tener en cuenta. También algunos problemas hormonales del varón repercuten negativamente; sobre todo si afectan a las hormonas sexuales, encargadas de la producción de los espermatozoides.

Las altas temperaturas empeoran también la calidad seminal, ya que la formación de los espermatozoides tiene lugar en el testículo a dos grados menos que la temperatura que registre el resto del cuerpo. Por ello no se recomienda exponerse al calor durante largos periodos de tiempo ni llevar pantalones o ropa interior ajustada.

Por último, algunos medicamentos pueden interferir en la regulación celular y, por ese motivo, en la formación espermática. Suplementos como los esteroides anabolizantes que se utilizan para ganar masa muscular pueden reducir también la calidad del esperma, en ocasiones de forma reversible, al abandonar el consumo, pero en otras de forma parcial o irreversible.

Cómo mejorar la calidad espermática

Cuando la calidad espermática se reduce por factores externos como el estrés, hay algunas recomendaciones que se pueden tener en cuenta, como cita el director médico de Ginemed:

  • Eyacular frecuentemente: “aunque puede disminuir la cantidad (lo que no ocurre siempre), la calidad espermática aumenta con los eyaculados frecuentes, puesto que mejora la calidad del ADN del semen al tener menos fragmentación espermática”.
  • Mantener un peso saludable, ya que “el exceso de peso produce alteraciones hormono-metabólicas que acaban suponiendo disminución de la cantidad y de la calidad del esperma”.
  • Controlar el estrés.
  • Evitar las enfermedades de transmisión sexual, ya que alteran directamente la calidad espermática.
  • Seguir una dieta equilibrada.
  • Abandonar el consumo de alcohol y tabaco (o reducirlo todo lo posible).
  • Mantener los testículos a una temperatura adecuada. Esta ha de ser 2 ó 3 grados inferior a la que tiene el cuerpo. Llevar ropa interior ajustada o darse baños de inmersión muy calientes no es adecuado en este sentido.

Si el varón sigue teniendo problemas para concebir hay distintas técnicas de fertilidad que pueden ayudarle. “Cada caso se trata de modo particular en las tres etapas del semen. Primero durante el periodo de fabricación de los espermatozoides, después durante la recogida de semen y, por último, durante la selección que hace el laboratorio de reproducción asistida. Este es el modo de asegurarno la mejor calidad posible y por tanto conseguir las mejores tasas de gestación en cada caso”, afirma el Dr. Pascual Sánchez.

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