La primera ola de calor del verano ya está aquí. Este lunes se han activado las alertas en 30 provincias y en algunas, las previsiones meteorológicas advierten que se superarán los 45 grados. Unas temperaturas tan elevadas pueden ser muy perjudiciales para la salud, sobre todo la de los bebés, que son especialmente vulnerables a golpes de calor y a la deshidratación. Por eso, para protegerlos debidamente, es fundamental seguir una serie de precauciones. Las más importantes a tener en cuenta son las siguientes:

Manténles correctamente hidratados

Dos de las personas que más sufren las altas temperaturas son los bebés y niños y los ancianos, esto es así debido a que tienen una menor capacidad de sudoración, menor sensación de sed y reserva hídrica. La matrona aconseja: “A un bebé menor de 6 meses hay que ofrecerle siempre lactancia materna exclusiva o biberón , nunca se le debe dar agua porque puede tener repercusiones en la digestión o diarreas, algo que les va a deshidratar más. Otro inconveniente es que les puede llenar la tripa de agua y esta no tiene nutrientes, con lo cual puede provocar pérdidas de peso”, señala Carla María Quintana Caballero (@matronaparami), matrona y Fundadora de @maternify_matronaparami. Además, añade la importancia de “ofrecer agua solo a los bebés mayores de 6 meses, el pecho asiduamente, si lo toman, fruta y, en definitiva, cosas fresquitas y que les mantengan hidratados”.

¿Qué ropa le pongo?

Si hay algo de lo que advierten los expertos siempre es de no ‘sobre abrigar’ a los bebés nunca, con independencia de la época del año en la que nos encontremos. En concreto, en verano, y con una ola de calor acechando, la matrona recomienda: “Si le va a dar el sol, a los bebés menores de 6 meses no está recomendado ponerles ningún tipo de crema protectora porque no hay evidencias claras que aseguren que les protege 100%, por lo tanto, lo ideal es que se tomen medidas protectoras con la ropa. Usar fibras naturales, nada de licras y colores oscuros, ya que pueden dar más calor. Siempre podemos ponerle una ropita larga pero que sea amplia, de algodón y que transpire… También se recomiendan las gafas de sol y los gorritos”.

En cuanto a las cremas de sol para los bebés mayores de 6 meses la experta nos comenta que “según la Academia Española de Dermatología, está recomendado usar cremas solares con filtros físico-minerales para bebés de 6 meses a 3 años y con factores químicos-orgánicos para mayores de 3 años. Estas, deben tener una protección mayor o igual a FPS 30, preferiblemente de FPS 50 y saber que, actúan 20 minutos después de su aplicación, por lo tanto, hay que aplicarlas antes de la exposición solar. Elegir protectores resistentes al agua y, aún así, cada 2 o 3 horas es conveniente volver a aplicarla para que estén siempre protegidos. Las cremas una vez abiertas duran aproximadamente 12 meses, por tanto, hay que renovarlas cada año”.

Cómo sé que tiene frío o calor

Con las altas temperaturas con las que tenemos que estar lidiando y la consecuente sensación de ahogo y calor el niño puede sudar, pero, ¡cuidado! porque según nos cuenta la matrona: “A veces es contraproducente desnudarles. Se les puede desnudar sin ningún problema si no hay ninguna corriente de aire, por ejemplo, pero dependiendo de las sábanas, del sofá o de la tela o soporte dónde les pongamos, pueden sudar más si están desnudos. Incluso, hay veces que pueden estar mejor con un body fresquito que haga que no se le pegue el cuerpo a la sábana, que desnudos completamente”.

Y, sin duda, en este apartado hay que mencionar una de las preguntas más cuestionadas por los papás: aire acondicionado, ¿sí o no? La matrona nos responde: “El aire acondicionado sí se puede usar, aunque se piense que es malo, pero si se mantiene a una temperatura constante, entre 22 y 24 grados. Incluso, puede ser más peligroso para el bebé dormir a 27 grados que con el aire”.

¿Le puedo sacar a pasear?

Cuando atravesamos una ola de calor como la que estamos sufriendo este verano, cada vez nos pensamos más el salir a la calle. Preferimos estar en lugares fresquitos y protegidos del sol. Con los bebés pasa exactamente lo mismo, y la matrona incide en que siempre hay que “usar el sentido común”. “Intentar sacarle a primera y a última hora del día, no a las horas centrales que es cuando hace más calor porque, además, dentro del carrito puede incluso hacer más calor todavía. Ir siempre por la sombra, que le de el sol lo menor posible y que vaya protegido con la ropa”.

Asimismo, la experta hace hincapié en que es muy importante evitar algo que hoy en día está muy en auge, que es “tapar el carrito con una muselina para quitarle luz o calor”, nos cuenta. “Esto es erróneo porque si tapas el carrito la temperatura comienza a subir y si no hay aire, hace un efecto invernadero, al igual que pasa en el coche. Mucho cuidado con eso porque hay mucho riesgo de muerte súbita del lactante y muerte por asfixia del bebé y, por desgracia, son muchos los casos”.

¿Le puedo bañar en la piscina o el mar?

Otra de las dudas más frecuentes cuando estamos en pleno verano a altas temperaturas es si es recomendable bañar a los bebés en la piscina o en el mar. La matrona nos aclara que “no se recomienda baños en la piscina y mar a menores de 6 meses debido a la exposición solar a la que se verán expuestos, que, además, se agrava por el reflejo del agua. Tampoco se recomienda por el cloro y la sal, ya que la piel de los bebés es mucho más sensible durante los primeros meses y pueden darle reacción”. Si después de estas recomendaciones, aún con todo, decides darle un baño a un bebé menor de 6 meses: “Si es en el mar, que sea siempre en aguas calmadas y si es en piscina que sea mejor de agua salada, el baño debe durar solo unos segundos porque los bebés se quedan fríos muy rápido, que sea lo más a la sombra posible y después del baño, darle una ducha de agua dulce para quitarles el exceso de sal o cloro”.