1. Cuidar la alimentación
En opinión de la experta, se pueden seguir recomendaciones sencillas a la hora de hacer nuestra lista de la compra. Por ejemplo, escoger carnes magras, retirar la piel de aves como el pollo, sustituir la mantequilla o la nata por el aceite de oliva en el cocinado o cambiar los lácteos enteros por su versión baja en grasa. “Estas son algunas maneras de mantener el colesterol a raya sin demasiado esfuerzo”, nos explica.
¿Hay alimentos que deberíamos evitar en el caso de que tengamos los niveles altos? “Quienes ya presenten niveles altos de colesterol, deben alejarse de las grasas saturadas presentes en alimentos como los quesos, los embutidos, salsas como la mayonesa, los ultraprocesados, fritos o dulces industriales, limitando su consumo a días señalados”, nos recomienda. “Es mejor optar por una dieta mediterránea rica en pescado, frutas y verduras y cereales de grano entero. Sin embargo, la clave está en la moderación más que en la prohibición”, puntualiza.