La sopa rica en proteínas y tan nutritiva que es ideal para tomar en otoño e invierno


Una buena sopa siempre es una gran aliada de las estaciones del año más frías. Y más aún si la llenamos de proteínas, vitaminas, minerales, fibra y todos los nutrientes que son imprescindibles para el buen funcionamiento de nuestro organismo. Todo ello lo tiene nuestra receta.

60 min
fácil
Sopa de pollo y zanahoria con fideos

Con la bajada de temperaturas, hay recetas que reconfortan incluso antes de probarlas. La sopa de pollo con verduras y fideos es una de ellas: ligera, nutritiva, rica en proteínas y perfecta para fortalecer el organismo en los meses fríos. No es casualidad que lleve generaciones siendo un remedio casero frente a catarros y estados de cansancio: hidrata, calienta y aporta energía de forma equilibrada.

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Esta versión está pensada para quienes quieren una sopa completa, sabrosa y con un perfil nutricional redondo: pollo, verduras de temporada, caldo aromático y fideos finos que aportan textura y saciedad. Además, es una receta muy flexible, ideal para adaptar a lo que tengas en casa.

Por qué esta sopa es tan nutritiva: beneficios reales

  • Proteínas de alta calidad gracias al pollo, fundamentales para el sistema inmunitario.
  • Vitaminas A, C y K procedentes de zanahorias, apio y otras verduras.
  • Minerales esenciales como el potasio y el fósforo.
  • Hidratación profunda por su base líquida, clave en procesos víricos.
  • Efecto reconfortante: el caldo caliente ayuda a despejar vías respiratorias.

Sabías que…

Diversos estudios señalan que la sopa de pollo mejora la hidratación y contribuye a reducir la inflamación de las mucosas nasales durante un resfriado.

Hay un dicho popular que reza de la siguiente manera: “las abuelas curan catarros con sopa de pollo”. Este remedio ancestral lo que hace es ayudar, gracias a su caldo caliente y a las proteínas del pollo, a hidratarnos -algo esencial en procesos catarrales y gripales en los que necesitamos beber mucho líquido-, despeja las vías respiratorias y nos reconforta cuando nos sentimos pachuchos.

¿Qué ingredientes necesitas para hacer una sopa de pollo con verduras y fideos?

Son muchas las variantes que admite esta sopa, pero nosotros vamos a emplear como ingredientes en esta ocasión: muslos de pollo, zanahorias, cebolla, apio, caldo. El caldo lo puedes sustituir por agua y aromatizarla con diferentes especias y hierbas aromáticas; también puedes 'tirar' de esos cubitos concentrados -aunque nosotros preferimos optar por algo más natural y casero- y, si no tienes muslos de pollo, nos vale también la pechuga.

© Adobe Stock
Esta sopa nos sirve para entrar en calor y llenarnos de nutrientes.

¿Cómo hacer sopa de pollo con verduras y fideos?

También las formas de elaborar esta sopa son varias. En algunos casos se rehogan primero los ingredientes para después cubrir con el agua y el caldo. Pero nosotros vamos a optar por poner en una cazuela los vegetales pelados y troceados y el pollo en crudo, y después echar al caldo para proceder a su cocción. Finalmente, sacaremos los muslos para quitarles la piel, deshuesarlos y desmenuzar la carne y volver a introducirla en la sopa. ¿No te parece facilísimo? Con el plus de que no vas a manchar apenas utensilios.

Errores comunes al hacer sopa de pollo (y cómo evitarlos)

  • Poner los fideos demasiado pronto: se pasan y absorben todo el caldo.
  • No desespumar el caldo: genera impurezas y un sabor más turbio.
  • Cocer el pollo a fuego muy alto: queda seco por dentro y duro por fuera.
  • Sobre cocinar las verduras: pierden nutrientes y textura.

Variaciones rápidas para personalizarla

  • Más proteica: añade garbanzos cocidos o tofu firme.
  • Estilo asiático: jengibre, salsa de soja y fideos de arroz.
  • Versión antiinflamatoria: cúrcuma y un chorrito de limón.
  • Para niños: usa pasta pequeña y evita el apio si no les encanta.

La sopa de pollo casera es uno de esos platos que reconfortan, alimentan y se adaptan a cualquier hogar. Con ingredientes básicos y una elaboración sencilla, puedes obtener una comida completa, nutritiva y perfecta para otoño e invierno. Un gesto que cuida, hidrata, calienta y, sobre todo, sabe a casa.

DALE AL PLAY

Ingredientes

  • 4 muslos de pollo
  • 500 gramos de zanahorias
  • 3 ramas de apio
  • 1 cebolla
  • 3 dientes de ajo
  • 1.5 litro de caldo de pollo
  • 125 gramos de fideos finos
  • 1 manojito de perejil
  • sal
  • pimienta negra

Preparación

  1. Pela las zanahorias y corta en rodajas.
  2. Pela la cebolla y corta en cuartos; quita las hebras del apio y pícalo también.
  3. Pela los ajos y córtalos en láminas.
  4. Coloca una olla en el fuego y añade los muslos de pollo con las zanahorias, la cebolla, el ajo, el apio y el perejil.
    Cubre con el caldo y lleva a ebullición.
  5. Retira la espuma que se forma en la superficie, salpimenta y cuece durante 1 hora a fuego bajo.
  6. Saca el perejil, los muslos de pollo y la cebolla.
  7. Quita la piel del pollo, deshuesa y desmenúzalo
  8. Pica la cebolla.
  9. Con la sopa aún en ebullición, añade los fideos y cuece el tiempo que indique el fabricante en el envase.
  10. Incorpora los trozos de pollo y la cebolla picada y mezcla bien antes de servir.

© ¡HOLA! Prohibida la reproducción total o parcial de este reportaje y sus fotografías, aun citando su procedencia.