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Para esta vistosa tarta con sabor a albaricoque vamos a utilizar una mezcla de dos queso diferentes: por un lado, el clásico queso crema y, por otro, queso tipo Quark (queso batido de textura untuosa, blanca y sabor ligeramente ácido). Verás que la combinación de ambos resulta muy rica.
La masa
- 200 g de Harina
- 60 g de Almendra molida
- 75 g de Azúcar
- 0.25 cucharadita de Sal
- 1 Huevo
- 150 g de Mantequilla a temperatura ambiente
El relleno
- 400 g de Queso quark
- 250 g de Queso crema
- 75 g de Azúcar
- 0.5 cucharadita de Extracto de vainilla
- Ralladura de limón (de medio limón)
- Zumo de limón (de medio limón)
- 200 ml de Nata de repostería
- 4 Huevos
- 1 cucharada de Harina de maíz
- 480 g de Albaricoques en almíbar
- Azúcar glas
LA MASA
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1.
En un cuenco grande echar la harina, las almendras, el azúcar y la sal y dejar un hueco en el centro.
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2.
Cascar dentro el huevo, añadir la mantequilla y mezclar con un tenedor.
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3.
Amasar con las manos. Formar una bola, envolverla en film y meterla 30 minutos al frigorífico. -
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1.
Mientras, en un recipiente mezclar los quesos, el azúcar, la vainilla, la ralladura y el zumo de limón, la nata, los huevos, y la harina hasta obtener una crema.
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1.
Sacar la masa del frigorífico, extenderla con un rodillo y ponerla en un molde engrasado de unos 25 cm de diámetro, procurando que suba 2 cm por la pared.
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2.
Añadir el relleno y colocar los albaricoques con el corte hacia abajo, presionando un poco.
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3.
Meter la tarta al horno a 200º durante unos 50 minutos.
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4.
Sacarla y dejar que se enfríe. Espolvorearla con azúcar, cortarla y servir.
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5.
Consejo: Si no dispones de mucho tiempo, puedes optar por una masa brisa precocinada en lugar de hacer la masa artesana.