Se cumple el primer centenario de su nacimiento y no podía haber una mejor vuelta al cine para Angelina Jolie. Después de dos años fuera de un set de rodaje, la estrella de Hollywood confirma su regreso con estas instantáneas del biopic Maria, donde la protagonista de Maléfica se convierte ahora en la gran dama de la ópera y eterna Traviata, María Callas. Quizás por eso, porque el acontecimiento es doble, estas fotografías han dado la vuelta al mundo.
Con grandes gafas, su característico moño en la nuca bajo un pañuelo de seda, guantes y un talleur de dos piezas y tweed , la diva de la pantalla se transforma en otra gran diva de los escenarios. Y lo hace de la mano del director chileno Pablo Larraín, un cineasta especialmente inclinado en bucear en el alma de algunas de las mujeres más emblemáticas del siglo XX. Comenzó con Jackie, sobre Jackie Kennedy; después vendría Spencer, acerca de Lady Di; y ahora, con esta cinta, explora los éxitos y las desventuras amorosas de la soprano griega, una leyenda tan caprichosa como trágica, tan triste como genial.
“Hace siete años que empecé a trabajar menos, aceptando únicamente trabajos que no requerían rodajes largos. Teníamos mucho que curar”, declaró Angelina durante la promoción de Eternals, su último filme hasta la fecha, sobre su ausencia del cine, un alejamiento que coincide con su difícil batalla legal con su ex, Brad Pitt , tras su divorcio.
