Este miércoles Carlos Felipe y Sofía de Suecia presentaron síntomas compatibles con la infección. Tras diagnosticarles el contagio y comprobar que se encuentran "bien dadas las circunstancias", aunque confinados en su vivienda junto a sus dos hijos, Alexander -de cuatro años- y Gabriel -de tres- para cumplir así con la correspondiente cuarentena, tocaba comprobar la situación de los demás royals suecos