Le ouscultan©GettyImages

Bebés

Qué es el BRUE, un episodio similar a la muerte súbita del lactante del que no se conocen las causas

El bebé que lo sufre está completamente sano y presenta los mismos síntomas de la muerte súbita, aunque sí logra sobrevivir

El BRUE es un concepto médico muy reciente, similar al de la muerte súbita del lactante, del que se llegó a diferenciar y definir por parte de los expertos después de un tiempo de valorar otros accidentes similares que no acababan en muerte. La historia comenzó en el año 1970, ante el concepto de muerte súbita abortada de aquellos lactantes que sufrían un evento aparentemente mortal pero lograban sobrevivir. En 1986 el Instituto Americano de la Salud y el Desarrollo plantea el concepto de ALTE (siglas en inglés de Apparent Life-Threatening Events) para representar eventos de muerte súbita frustrada, y ya muy recientemente, en el año 2016, la Sociedad Americana de Pediatría recomienda un nuevo concepto que es el BRUE, del inglés, Brief Resolved Unexplained Events, como Accidentes o eventos breves, resueltos e inexplicados.

¿Qué es el BRUE y cómo pueden reconocerlo los padres?

El BRUE (evento, breve, resuelto e inexplicable) no es un trastorno específico bien delimitado, sino un término para describir un episodio repentino, breve y al final resuelto, en el que ocurrió una alteración del estado hemodinámico y de la capacidad de respuesta de un lactante normal y sano con síntomas clínicos de muerte aparente. Generalmente se manifiesta como un episodio de palidez o cianosis, con respiración anormal, crisis de apnea, tono muscular alterado y disminución de la capacidad de respuesta con signos clínicos de muerte aparente o muerte inminente. Son eventos que duran menos de un minuto y que se presentan en niños menores de un año.

¿Por qué se produce el BRUE?

No se sabe con exactitud, pues el BRUE solo se diagnostica en niños previamente sanos y cuando no es posible explicar el evento. No se considera en lactantes con fiebre u otros signos de enfermedad respiratoria, neurológica o cardiopulmonar.

Debemos recordar que el término BRUE se aplica solo a eventos para los cuales no existe una explicación o una causa subyacente, y es necesario determinar, con anamnesis (exploración en la que el doctor intenta recavar información sobre el suceso o el paciente), examen físico y pruebas analíticas y de imagen, que el lactante estaba completamente sano y no presentaba ninguna enfermedad o anomalía.

En el hospital©GettyImages

¿Cuáles son los riesgos que conlleva este evento de salud inexplicable?

Según el historial clínico y las exploraciones físicas y analíticas los BRUE se clasifican como de bajo riesgo o alto riesgo. Desgraciadamente, el máximo riesgo de estos pacientes es que el BRUE que padecen deje de serlo y se transforme en un dramático final, en un síndrome de muerte súbita del lactante, con el que ya dijimos está íntimamente emparentado.

-Los lactantes de bajo riesgo

Se considera que un bebé tiene menos riesgo de sufrir un BRUE cuando presentan las siguientes características:

  • Tiene más de dos meses de edad y no fueron, al nacer, prematuros ni dismaduros.
  • Solo ha tenido una crisis previa que no precisó de reanimación cardio-pulmonar.
  • La exploración física y analítica es normal.

-Los lactantes de alto riesgo

Son de alto riesgo para sufrir un BRUE todos aquellos que no presentan las características de los de bajo riesgo. Estos pacientes de alto riesgo suelen precisar de ingreso hospitalario para realizar una vigilancia estrecha de sus síntomas, una monitorización cardiorrespiratoria prolongada y diversos análisis de laboratorio y diferentes pruebas de imagen, para así poder realizar un diagnóstico diferencial exhaustivo.

 

¿Hay tratamiento para el BRUE?

No existe tratamiento farmacológico. La educación de los padres o cuidadores, la vigilancia continuada y el seguimiento cercano son las medidas a tomar.

Dormir en decúbito supino será siempre beneficioso. Si se identifica alguna causa que provocara estos eventos, es necesario tratarla. El uso de monitores cardio-respiratorios y de apnea de uso domiciliario es muy discutido por los expertos, pues su uso no disminuye la incidencia y genera gran ansiedad. La enseñanza y el entrenamiento de reanimación cardio-pulmonar a padres y cuidadores puede ser necesaria.