Las mejores fotos de la conmemoración del 80º aniversario de la liberación de Auschwitz

Los reyes Guillermo Alejandro y Máxima de Países Bajos y su primogénita, la princesa Amalia, aterrizaron en Polonia a primera hora de la tarde y fueron recibidos en el aeropuerto de Katowice por el Primer Ministro Dick Shoof. 

Amalia recibió un ramo de flores por parte de Jacques Grishaver, presidente del Comité Holandés de Auschwitz. Vestida de riguroso luto, al igual que su madre, la joven lució sumamente elegante con su tocado de lazo realizado en terciopelo.

Es la primera vez que Amalia acude a un acto internacional de tal trascendencia histórica como el aniversario de la liberación de Auschwitz. Este retrato de su rostro, enmarcado por la redecilla de su velo y unos sutiles pendientes dorados con forma de gota, representa el futuro de Países Bajos.

Máxima vistió un abrigo de lana negro, de Natan, que también usó durante el funeral de su cuñado, el príncipe Friso, en 2013. Sobre su cabeza, un apropiado turbante de terciopelo, de la firma Bronté, que acompañó con joyas de perlas y diamantes que pertenecen a la familia real neerlandesa desde el siglo XIX.

La reina de Países Bajos estuvo sentada junto a los reyes de España. Doña Letizia apostó por un conjunto sobrio de pantalón, que culminó con una capa de punto que destaca por su cuello de pelo. Las temperaturas este lunes por la tarde rozaron los 5 grados centígrados. 

Matilde de Bélgica, también en primera fila, compartió encuadre con el rey Carlos III, y a ambos se les vio especialmente emocionados durante la ceremonia. En lugar de optar por el tradicional negro de luto, la mujer de Felipe de Bélgica acudió vestida de gris.

Matilde acudió a la conmemoración vestida con un conjunto de traje (chaqueta y falda) en lana gris, de Natan, cubierto con una capa larga más oscura. Sobre su cabeza, llevó una diadema ancha a juego. 

La reina Mary de Dinamarca, visiblemente emocionada. La mujer de Federico X se recogió el pelo con un tocado pillbox, de Susanne Juul, realizado en terciopelo negro. El broche brillante sobre su pecho, aparentemente antiguo, aportó algo de brillo a su solemne atuendo de luto.

Los reyes Guillermo Alejandro y Máxima de Países Bajos también estuvieron en Auschwitz-Birkenau para las conmemoraciones llevadas a cabo en 2015 y 2020, aunque este año la novedad es que trajesen a la heredera al trono, Amalia, quien participó en cada etapa de la ceremonia.