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Sin duda, la menopausia es un momento complejo en la vida de muchas mujeres. Durante esta etapa, ya sea un tiempo antes o durante la misma, podrías experimentar entre otros, una serie de síntomas, todos ellos de naturaleza hormonal como pueden ser insomnio, sofocos, sudoración nocturna, retención de líquidos y aumento de peso. Tal y como nos cuenta la farmacéutica Mar Sieira, para ayudarte, de manera natural, a sobrellevar todos estos síntomas, existen una serie de infusiones enfocadas a paliar cada uno de ellos.

 

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Insomnio: Melisa

La experta nos cuenta que también se la conoce por el nombre de limoncillo. Su aroma es muy relajante, por lo que es una buena alternativa para mejorar el descanso en esa etapa en la que hay mujeres que reconocen que duermen peor. Además, tiene un agradable sabor. Un truco: se suele asociar con la manzanilla para potenciar su efecto.

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Insomnio: Pasiflora

Se utiliza en infusión tanto para tratar la ansiedad como el insomnio en general. Si es tu caso durante esta época, puedes ayudarte de esta planta o de alguna combinación de la misma con valeriana, otra planta que actúa como relajante. Pero si ya estás utilizando benzodiacepinas, mejor abstente de utilizar estas dos plantas.

 

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Insomnio: Hierba de San Juan (o Hipérico)

Mar Sieira nos explica que su infusión se utiliza para a aliviar los síntomas de la menopausia, especialmente cuando cursa con ansiedad, nerviosismo o estados bajos de ánimo, ya que contiene hipericina, que ayuda a mejorar los estados de decaimiento temporal. Eso sí, ten en cuenta que si estás consumiendo medicación para dormir, o para mejorar el estado de ánimo, no deberías consumirla.

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Sofocos y sudoración nocturna: Salvia

Es una planta medicinal que contiene propiedades termorreguladoras, y que nos ayuda a paralizar las terminaciones nerviosas de las glándulas sudoríparas. Por este motivo, la infusión de las hojas de esta planta se utiliza para combatir la sudoración nocturna, uno de los problemas que pueden afectar a muchas mujeres en la etapa de la menopausia.

 

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Sofocos y sudoración nocturna: Hamammelis

Quizá es algo menos conocido, pero la farmacéutica nos recomienda también este arbusto procedente de América del Norte. Aunque tiene muchos usos, como por ejemplo en trastornos de la circulación venosa, como pueden ser las varices, las hemorroides y la flebitis, esta planta medicinal también es ampliamente usada en trastornos de la menopausia. De hecho, es una de las infusiones de elección para combatir la sudoración nocturna. Sin embargo, no debes utilizarla en períodos prolongados sin la supervisión de tu médico.

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Sofocos y sudoración nocturna: Infusión de flor de tilo

Estamos ante otra planta muy adecuada para tratar los sofocos y sudoración nocturna durante la menopausia. Según recomienda la farmacéutica Mar Sieira, puedes tomarla una hora antes de dormir para que haga su efecto. También se comporta como diurético, favoreciendo la eliminación de líquidos del organismo que tienden a retenerse durante la menopausia.

 

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Retención de líquidos (y/o aumento de peso): Cola de caballo

Ayuda a combatir la retención de líquidos ya que posee una acción diurética pero a la vez remineralizante. Por un lado, los flavonoides y las sales minerales que contiene aumentan el flujo de las vías urinarias y, por el otro, su contenido en potasio, magnesio y silicio orgánico, remineraliza el organismo y evita la pérdida de densidad ósea, a la que también la mujer comienza a enfrentarse en esta época de su vida.

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Retención de líquidos: Jengibre

Este producto se ha ganado un hueco por méritos propios en muchas despensas. No son pocas las personas que aprovechan sus bondades, también en forma de infusión. Y es que el té de jengibre te ayudará a que puedas dormir mejor y a paliar las sudoraciones y los sofocos nocturnos. Como a veces su sabor es un poco fuerte, puedes añadir a la infusión unas gotas de limón o un poco de miel.

 

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Retención de líquidos: té verde

Además de sus conocidas y muy alabadas propiedades antioxidantes, esta saludable infusión ayuda a acelerar el metabolismo, es decir, nos ayuda a perder peso. El té verde aumenta la combustión de las grasas, ayuda a bajar los niveles de colesterol y tiene importantes propiedades antioxidantes por su alto contenido en compuestos polifenólicos. Por eso, además de por sus propiedades diuréticas, es una infusión aliada de este período de la vida de la mujer.

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