Si hay algo que nunca falta en el neceser de Meghan Markle es el lápiz de ojos negro o marrón oscuro. A la Duquesa de Sussex le encanta lucir una mirada muy intensa y perfilada, aunque es cierto que para el resto de su maquillaje se decanta por la sencillez y naturalidad, recurriendo a bases ligeras que dejan al descubierto sus pecas, un toque de rubor en las mejillas y un labial nude o rosa pálido.