Asustados porque el nivel del agua del mar también estaba creciendo rápidamente y, por ende, comiéndose la arena, los concursantes han intentado guarecerse de la lluvia bajo sus abrigos impermeables y sobre las pequeñas lonas que consiguieron en las pruebas de recompensa, pero ninguna de sus soluciones ha impedido que se mojaran y pasaran mucho frío.