El pasado fin de semana, el bautizo de Rosario Fitz-James Stuart, la hija de los duques de Huéscar, puso en el foco mediático a la familia Palazuelo. Una atención por parte de la prensa que comenzó cuando Sofía Palazuelo entroncó con Fernando Fitz-James Stuart, el hijo del actual duque de Alba y heredero de uno de los títulos nobiliarios más emblemáticos de España. Entonces, todas las miradas se pusieron sobre Fernando, hermano mayor de Sofía, quien ejerció de padrino. En cambio, en esta ocasión, los flashes han sido para Beltrán Palazuelo, el tercero de los hermanos de la duquesa.
¿La razón? Fue el padrino de la pequeña Rosario. Desde entonces, el empresario, de 31 años, ha copado numerosos titulares durante la última semana por su participación en la ceremonia. Una amiga de su hermana, la chef Blanca Barrera-Cuadra, fue la madrina de la que, próximamente, será la duquesa de Alba. Su bautizo ha sido uno de los mayores acontecimientos que la ciudad de Sevilla recuerda durante los últimos meses.
Beltrán aprovechó este evento familiar para oficializar en sociedad su relación sentimental con su novia, Eugenia Hernández-Antolín Cabello de los Cobos
Beltrán, analista en la compañía de seguros Santalucía, aprovechó este evento familiar que se celebró en la iglesia de San Román y, posteriormente, en el palacio de Las Dueñas de la capital hispalense para oficializar en sociedad su relación sentimental con su novia, Eugenia Hernández-Antolín Cabello de los Cobos. La cuñada de Sofía Palazuelo es licenciada en Derecho y en Administración de Empresas por el Instituto de Empresa, una de las universidades más prestigiosas de nuestro país. Actualmente, Eugenia trabaja en un conocido despacho de abogados.
Una relación con historia
La joven está emparentada con otros nombres de la aristocracia, como los condes de Mirasol, y es nieta de Martín Cabello de los Cobos y María Antonia Mancha, los fallecidos condes de Fuenteblanca. Su abuelo descendía del primer conde de Fuenteblanca, Manuel Cándido Moreno Ciadoncha. Este político español fue cuñado de Manuel Godoy, primer ministro del rey Carlos IV y uno de sus validos más fieles, ya que estaba casado con su hermana María Ramona Godoy. Más de 200 años después, la familia del duque de Alba y los descendientes de Godoy se reencuentran. Curiosamente, ambas familias son protagonistas de uno de los grandes misterios de la historia del arte de nuestro país: ¿quién era ‘La maja desnuda’ a la que pintó Goya? Hay versiones que indican que fue la entonces duquesa de Alba, María Teresa de Silva; otras, en cambio, sostienen que se trataba de Pepita Tudó, amante de Manuel Godoy.
Conexión Lima
Por su parte, Jaime Palazuelo, el segundo de los tres hermanos de la duquesa de Huéscar, acudió al bautizo de Rosario Fitz-James junto a su prometida. Se trata de la joven peruana Micaella Rubini, quien lució un favorecedor vestido de Es Fascinante, el portal de su amiga Valentina Suárez-Zuloaga. Los que la conocen destacan su interés por la moda y su “allure”. Jaime y Micaella contraerán matrimonio el 10 de septiembre de este año en Toledo. La celebración tendrá lugar en el palacio de Galiana, un fabuloso edificio de cuya gestión se encarga la propia Sofía Palazuelo. Se trata de una antigua almunia mudéjar del siglo XI ubicada en las orillas del río Tajo en la que vivió la emperatriz Eugenia de Montijo y que es propiedad de la familia de Sofía Barroso, la madre de Fernando, Jaime, Beltrán y Sofía Palazuelo. La boda promete reunir de nuevo a la familia Palazuelo. Una nueva ocasión para conocer a sus fascinantes componentes… y a sus nuevas incorporaciones. Como Eugenia y Micaella.
