Rocca Scaligera, un encantador castillo en Sirmione, a orillas del lago de Garda, Italia© Freesurf - stock.adobe.com

Así es el lago de Garda: enmarcado por los Alpes y con pueblos medievales posados en sus orillas

Durante mucho tiempo ha sido el favorito de la aristocracia, por su clima templado, gracias a estar enmarcado por montañas, sus aguas cristalinas en las que se reflejan encantadores pueblos. Si lo visitas, también entrará directo al top 10 de tu lista de lugares favoritos.


18 de julio de 2025 - 14:23 CEST

A medio camino entre las archiconocidas ciudades de Milán y Venecia, muy cerquita de la ciudad de Verona (de la que le separan tan solo 30 kilómetros), y enmarcado por las imponentes montañas de los Alpes se encuentra el que es el lago más grande de Italia y el más inspirador: el lago di Garda. Tan grande y alargado que, en algunas zonas, más parece un mar tranquilo. Esta bellísima extensión de agua al norte de Italia gustó siempre mucho a la aristocracia, primero por su clima templado, favorecido por las montañas que lo protegen de temperaturas frías, pero también por sus aguas cristalinas y su exuberante vegetación de olivos, cipreses, limoneros o naranjos. Y, especialmente, por los pintorescos pueblitos medievales posados a sus orillas, en los que levantaron preciosas villas y castillos en lo alto que hoy ofrecen su postal más idílica.

Para ti que te gusta

Este contenido es exclusivo para la comunidad de lectores de ¡HOLA!

Para disfrutar de 5 contenidos gratis cada mes debes navegar registrado.

Este contenido es solo para suscriptores.

Suscríbete ahora para seguir leyendo.

TIENES ACCESO A 5 CONTENIDOS DE CADA MES POR ESTAR REGISTRADO.

Recuerda navegar siempre con tu sesión iniciada.

Panorámica de Limone sul Garda a orillas del lago de Garda en Italia© xbrchx - stock.adobe.com

Poetas y escritores de todas las épocas han elogiado desde siempre este lago por su belleza. El primer que quedó fascinado por él fue el poeta latino Catulo, cuya familia tenía una villa en Sirmione, tras él, Joyce, Kafka, Goethe, Ibsen… Hoy os contamos que tiene 51 kilómetros de largo por 17 de ancho y es un lago glaciar que se formó al final de la última glaciación. En sus aguas se posan ocho islas pequeñas llamadas Garda, San Biagio, Coniglio, Val di Sogno, Olivo, Trimelone y los islotes de Altare y Stella. 

Es un lugar tranquilo, pero curiosamente sus aguas son apreciadas por surfistas y aficionados a los deportes náuticos debido a un efecto térmico que provoca corrientes de aire. Riva del Garda, Torbole y la playa del Arco, al norte, son sus poblaciones de referencia.

© Getty Images/Cavan Images RF

ALGUNOS DE SUS IMPRESCINDIBLES

  • Visitar algunos de los pueblos medievales que se asoman a él, especialmente Malcesine, en el norte, de los más bellos del entorno, con un casco antiguo de calles empedradas y laberínticas que llevan hasta su encantador puerto. Pero también Sirmione, Limone Sul Garda, Riva del Garda...
  • Contemplar la mejor vista del lago desde la cima del Monte Baldo, a 1700 metros de altitud, al que se asciende en el funicular de Malcesine. El trayecto apenas dura diez minutos, pero en ese breve intervalo llega a girar 360º ofreciendo una panorámica espectacular.
  • Hacer un crucero al atardecer (también los hay diurno, pero el atardecer le aporta encanto) o un tour en lancha motora por los castillos del lago.
© Rene Hartmann - stock.adobe.com
  • Acercarte a conocer el castillo medieval de la Rocca Scaligera, en la pequeña localidad de Sirmione, al sur del lago, un raro ejemplo de fortificación de un puerto medieval. También aquí se encuentran las cuevas de Catulo, ruinas de una antigua villa romana.
  • Darte un baño en la playa de piedra de Jamaica, después de una corta excursión desde Sirmione.
  • Comer en los restaurantes del puerto viejo de Desenzano, al sur del lago, y la más fiestera de las localidades a orillas del lago. Su castillo en lo alto de una colina, su catedral y su villa romana también merecen una visita.
© ShapikMedia - stock.adobe.com
  • Visitar el Vittoriale degli Italiani, una ciudadela monumental en Gardone Riviera rodeada de espectaculares jardines y construida en memoria el poeta Gabriel D’Annunzio y las hazañas del pueblo italiano durante la Primera Guerra Mundial.
  • Pasar un día en las Termas de Sirmione, cuyas aguas sulfurosas emergen del subsuelo del lago.
  • Comprar el famoso limoncello en Limone sul Garda, que, como indica su nombre, es el lugar donde se cultivan los cítricos que perfuman el pueblo.
  • Visitar el parque temático más famoso de Italia: Gardaland. Está junto al lago, en Castelnuovo del Garda, con una montaña rusa acuática.
© stefanotermanini - stock.adobe.com

¿CÓMO LLEGAR AL LAGO DI GARDA?

 El aeropuerto más cercano al lago di Garda es el de Verona, y el área de más fácil acceso es la zona sur, comunicada en tren con Milán, Verona y Venecia. También se puede llegar al aeropuerto de Bérgamo o a Milán. Para ir de un pueblo a otro del lago, lo mejor son los ferris (aliscafos) y las motonave (más lentas), que enlazan distintos puertos. Otra opción es alquilar un coche.

© ¡HOLA! Prohibida la reproducción total o parcial de este reportaje y sus fotografías, aun citando su procedencia.